SAO PAULO.- El juez federal Sérgio Moro decretó este jueves el ingreso a prisión del ex Presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, condenado a 12 años de cárcel por corrupción en una causa relacionada con la trama destapada en la petrolera estatal Petrobras.
Esto se da luego de que el Tribunal de Apelaciones diera luz verde para que el juez ordenara la orden de reclusión para el ex Mandatario, después de que la noche del miércoles el Supremo Tribunal Federal rechazara el requerimiento presentado por la defensa de Lula.
El ex gobernante pretendía seguir preparando en libertad la defensa en este juicio, donde se le acusa de recibir desde la constructora OAS un departamento tríplex. Esta solicitud, no obstante, fue desestimada anoche.
De esta forma, Da Silva tiene plazo hasta las 17:00 horas de este viernes para entregarse voluntariamente ante la Policía Federal de Curitiba. Esta medida fue tomada por Moro "en atención a la dignidad del cargo que ocupó".
De acuerdo al magistrado, los detalles de la entrega del ex Presidente deberán acordarse entre su defensa y el delegado de la Policía Federal Maurício Valeixo.
Moro agregó que "en razón de la dignidad del cargo ocupado, se preparó previamente una sala reservada, especie de Sala de Estado Mayor, en la propia Superintendencia de la Policía Federal, para el inicio del cumplimiento de la pena, y en la que el ex Presidente
quedará separado de los demás presos, sin ningún riesgo para la integridad moral o física".