BEIRUT.- Los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), que desde hace un tiempo han logrado ser arrinconados en un último bolsón de resistencia en el sur de Damasco, comenzaron a ser evacuados este domingo hacia el desierto, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
La operación se realiza este fin de semana tras la determinación de ciertos acuerdos para sacar a los insurgentes de la zona de conflicto y así trasladarlos -junto a sus familias- al desierto, donde aún quedan zonas tomadas por los yihadistas.
"Seis buses ingresaron en la noche del sábado al domingo en la zona bajo control del EI para transportar a los combatientes del grupo y sus familias, antes de partir de madrugada hacia el desierto sirio", donde este movimiento islámico radical todavía conserva algunos territorios, indicó el director del OSDH, Rami Abdel Rahmane.
Esta operación no es la primera que se realiza en Siria, anteriormente también se han puesto a disposición de estos grupos buses que les permiten trasladarse desde las ciudades civiles del país hasta áreas en que se reúnen con otras facciones de sus grupos.
El OSDH espera que estos viajes se realicen sin problemas entre ambos sectores, para lograr la reubicación de estas personas sin mayores complicaciones. Se espera que durante este domingo ya queden completamente establecidos en su nueva ubicación.