SEÚL.- Las dos Coreas se reúnen hoy para concretar para agosto un encuentro de familias separadas por la guerra y otros asuntos de cooperación humanitaria en línea con lo acordado en la reciente cumbre de abril entre sus respectivos líderes.
Delegaciones de la Cruz Roja de ambos países tenían previsto iniciar una reunión en torno a las 10:00 hora local en un hotel del célebre monte Kumgang, en la costa suroriental norcoreana, según confirmó a EFE una portavoz de Unificación.
Este hotel ha acogido anteriormente en varias ocasiones reuniones de familias separadas a raíz de la Guerra de Corea (1950-1953).
La delegación surcoreana está encabezada por el director de la Cruz Roja surcoreana, Park Kyung-seo, mientras que el equipo del Norte va liderado por el vicepresidente del comité encargado de relaciones intercoreanas en el Norte, Pak Yong-il.
"Regresaremos tras haber mantenido consultas positivas con el Norte sobre una serie de asuntos humanitarios, en concreto, sobre como resolver la agonía de 57.000 familias separadas", explicó Park en declaraciones a la agencia Yonhap poco antes de cruzar en dirección norte el paso fronterizo oriental entre los dos países.
El Presidente surcoreano, Moon Jae-in, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, preacordaron en su cumbre del pasado 27 de abril celebrar una reunión de familias separadas el 15 de agosto.
Si se concreta su celebración, será la primera reunión de este tipo desde octubre de 2015 y una muestra más del actual acercamiento entre Seúl y Pyongyang y del giro diplomático por el que ha apostado el régimen este año.
El Gobierno surcoreano ha demandado con insistencia la necesidad de retomar estos encuentros debido al envejecimiento de los miembros de estas familias separadas hace más de 65 años.
El número de surcoreanos registrados para solicitar plaza en estas reuniones era de 132.124 en mayo (el 86 % de los cuales tiene 70 años o más), aunque se cree que solo unos 57.000 de ellos siguen vivos.
Entre otros temas que podrían tratarse en la reunión está la reactivación de paquetes de ayuda humanitaria surcoreana para el Norte o el polémico caso de un grupo de camareras norcoreanas que desertó al Sur en 2016 y cuyo retorno reclama Pyongyang.
Seúl aseguró en su momento que vinieron por propia voluntad, pero posteriores testimonios han subrayado aspectos contradictorios en su relato.