SANTIAGO.- El triunfo de Francia en el Mundial de Fútbol de Rusia 2018 no ha pasado desapercibido. No solo a nivel deportivo ha destacado la selección gala, sino que también ha llamado la atención en el punto de vista más social y, por qué no decirlo, el político. Esto, dado el origen de la mayoría de sus jugadores, fiel reflejo de la inmigración.
Desde que el conjunto de "Les Blues" obtuvo la Copa del Mundo en 1998 que su multiculturalidad se ha vuelto su sello.
Esto ha llevado a que distintas personas comenten que el equipo francés es el reflejo del fenómeno de migración mundial, pero por sobre todo, destacan la ascendencia africana de varios de los integrantes del cuadro.
El Presidente venezolano, Nicolás Maduro, comentó luego de la final del domingo que "el equipo de Francia parecía el equipo de África, ganó África realmente, los inmigrantes africanos que han llegado a Francia".
Los dichos de Maduro causaron molestia en algunos sectores de Francia, especialmente al diputado francés Jean-Christophe Lagarde, que anunció este martes que presentará una denuncia por incitación al odio racial al Mandatario venezolano.
Esto en el marco que la derecha conservadora del país, agrupada en el Frente Nacional que lidera la ex candidata presidencial Marine Le Pen, ha propuesto que se acabe el ingreso de inmigrantes.
El diputado reconoció que su demanda es meramente simbólica pero dijo que las declaraciones de Maduro son "negar lo que es Francia".
Los orígenes
La empresaria chilena Debora Calderón, en una columna publicada el martes en El Mercurio, comentó que en 1998 "el Frente Nacional acusaba a la selección francesa de ser un equipo africano. En 2018, el progresismo multiculturalista reivindica a la selección francesa como el sexto equipo africano del Mundial".
"Sus jugadores pueden ser de origen africano, pero han llegado donde están gracias a Francia y son franceses. Francia es su patria, una cuestión innegable", agregó la empresaria.
Y las cifras así lo reafirman: de los 23 seleccionados al menos 16 tienen sus orígenes en otros países: 14 de África, 1 de Europa y 1 de Asia. Sin embargo, del total,
sólo tres de los jugadores nacieron fuera de Francia y se nacionalizaron, mientras que el resto nació en el país.
Por ejemplo, el defensa Samuel Umtiti nació en Camerún, pero dejó el país africano cuando tenía solo dos años para radicarse junto a su familia en París. Algo similar sucede con Steve Mandanda, originario de la República Democrática del Congo, y Thomas Lemar, proveniente de la isla caribeña de Baie-Mahault, Guadalupe.
Los nacidos fuera de Francia junto a los jugadores con ascendencia foránea, muestran que la inmigración está inserta en la realidad francesa desde el siglo pasado y que la diversidad es parte del país.
La lucha contra el racismo en Francia
Pese a la composición de distintos orígenes en Francia desde hace muchos años, el gobierno ha tenido que pelear contra el racismo.
El Gobierno francés en marzo presentó el "plan nacional de lucha contra el racismo y el antisemitismo", que tiene en su punto de mira a las plataformas de Internet que distribuyen contenidos que incitan al odio. Entre otras medidas, busca penalizar a las redes sociales que no retiren rápidamente ese tipo de material.
También, la semana pasada, se aprobó la reforma constitucional, que entre otras cosas,
busca sacar el término raza del texto jurídico.
El texto actual del artículo dice: "Francia es una República indivisible, laica, democrática y social. Garantiza la igualdad ante la ley de todos los ciudadanos sin distinción de origen, de raza o de religión". El nuevo texto dirá: "Francia es una República indivisible, laica, democrática y social. Garantiza la igualdad ante la ley de todos los ciudadanos sin distinción de sexo, de origen o de religión".
El argumento principal contra la palabra raza y a favor de la palabra sexo en la Constitución lo planteó en la Asamblea Nacional el diputado Jean-Christophe Lagarde. El término sexo se introduce, según su justificación de la enmienda, para "afirmar la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley, sin discriminación entre hombres y mujeres". El término raza se suprime porque "científicamente está infundado" y "jurídicamente es inoperante".
Lagarde enfatizó en su intervención la ausencia de los diputados de la extrema derecha durante las discusiones en comisión y durante el voto.
"Es justamente de estos bancos de los que que las tesis racistas han emergido siempre, buscando hacerlas científicas, buscando enseñarlas, buscando promulgarlas política y filosóficamente", subrayó.
Así, el triunfo de la selección francesa en el Mundial de Rusia profundiza la crítica a estos grupos antiinmigración, argumentando que la diversidad es parte del logro que tiene celebrando a los galos.