SANTIAGO.- La Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia de Bolivia (TSJ) decidió recomendar al Parlamento que apruebe un juicio contra el ex Presidente Carlos Mesa por el llamado
caso Quiborax, que investiga las responsabilidades tras la millonaria indemnización que el Estado boliviano debió pagar a una empresa chilena por incumplimiento de contrato.
La instancia decidió así darle su venia al proceso solicitado por la Procuraduría y que ya había sido validada por la Fiscalía General, la cual responsabiliza al ex Mandatario y a sus ex ministros Gustavo Pedraza (Desarrollo Sostenible), Freddy Escobar (Minería e Hidrocarburos) y Luis Fernández (Trabajo) de haber cometido delitos de "resoluciones contrarias a la Constitución y a las leyes, incumplimiento de deberes y conducta antieconómica".
Todo esto, a raíz de que el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), perteneciente al Banco Mundial, acogiera la demanda de la minera chilena no metálica Quiborax y ordenara a Bolivia el pago de US$42,6 millones por prácticas ilegales y discriminatorias, luego de que el entonces Gobierno de Carlos Mesa decretara en 2004 la nulidad de las 11 concesiones mineras de la empresa boliviana NMN, con capitales de Quiborax.
Según reporta El Deber, la Procuraduría afirma que Mesa y sus ministros incumplieron el procedimiento establecido en la propia ley boliviana para expulsar a la minera, que se desempeñaba en la extracción de ulexita en la zona del Salar de Uyuni en Potosí. Esto, recalca la entidad, provocó un daño económico al Estado altiplánico.
Esto también refuerza la teoría del Gobierno de Evo Morales, que se ha mantenido en un constante conflicto con el ahora vocero internacional de la demanda presentada por Bolivia contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.
Ahora, será el pleno del Tribunal Supremo el que decidirá este miércoles el futuro de Mesa y sus ministros. En caso de ratificar la resolución de la Sala Penal, el caso deberá ser resuelto por la Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia, de mayoría oficialista, lo que podría concluir con la comparecencia de Mesa ante la justicia.
El hecho ha sido sumamente criticado desde la oposición, que ve al ex Mandatario como la gran carta para vencer a un debilitado Evo Morales en las elecciones presidenciales de 2019, asegurando que esto sólo se trata de una persecución política.
