CARACAS.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó este miércoles de "extremista" y "loco" al vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, quien lo acusó de financiar la caravana de migrantes centroamericanos que se dirige a su país.
"Si no fuera porque lo dice un extremista, un loco extremista, como Mike Pence (...) uno sólo se reiría de eso, lo primero que provoca es risa y lo segundo es preocupación porque ya comienza la paranoia imperialista a acusar al presidente Maduro y a Venezuela de todo lo que le ocurre a ellos", dijo.
Alex Mensing, coordinador de la asociación Pueblo Sin Fronteras que acompaña la caravana, también desechó la versión de Pence al asegurar que se trata de "una situación de crisis humanitaria que viene desde hace muchos años haciéndose. Esto no es algo que surgió de la nada".
"Ridícula la idea de que alguien pueda pagar a 10,000 personas para convencerlas de que abandonen a su país, sus casas", dijo en una conferencia telefónica con periodistas desde California. Agregó que no se sabe aún qué rumbo tomará la caravana, a la que califica de un "éxodo masivo de personas", ni cree que muchos lleguen a Estados Unidos.
"Creo que es muy poco probable que lleguen 10,000 personas juntos a una ciudad fronteriza entre México y Estados Unidos. Va a haber gente que se queda en México, va a haber gente que se va a diferentes fronteras porque cada quien viene con sus diferentes planes", agregó.
En Mapastepec, pobladores del lugar esperaban a lo largo de la carretera a los migrantes para darles agua, plátanos o sopas. En un parque del lugar se reunían los que llegaban y se tiraban en el suelo a descansar. Algunos levantaron carpas con bolsas de plástico para protegerse del sol.
Cada año, miles de hondureños, guatemaltecos y salvadoreños huyen de la pobreza y la violencia en casa en busca del "sueño americano". Sin embargo, muchos son deportados y otros pierden la vida en la larga travesía desde Centroamérica.
Desde el fin de semana,
México ha recibido 2,727 solicitudes de refugio del grupo de centroamericanos, incluidos niños, pero ha advertido a los migrantes que no podrán ingresar ilegalmente a su territorio.
Es probable que la inmigración ilegal sea un tema importante en las elecciones legislativas del 6 de noviembre en Estados Unidos, en la que los demócratas buscan ganar el control de la Cámara de Representantes.
Afirmaciones hechas en los últimos días por Trump y algunos activistas conservadores en Washington, acerca de que "criminales y desconocidos de Oriente Medio" estarían mezclados con la caravana, no han sido corroboradas.