QUITO.- El Presidente de Ecuador, Lenín Moreno, admitió este jueves que no está contento con la presencia del fundador de Wikileaks, Julian Assange, en la embajada ecuatoriana en Reino Unido e informó que se han realizado gestiones con el gobierno británico para que salga sin ser extraditado a EE.UU..
"A mí no me agrada la presencia del señor Assange en la embajada de Ecuador", dijo Moreno en un diálogo con la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión en Quito, y agregó que le parece "demasiado tiempo que esté casi encarcelado" en la sede diplomática.
Assange permanece desde hace más de seis años en la embajada ecuatoriana en Londres, donde se refugió para evitar ser extraditado a Suecia, donde se lo acusaba de abusos sexuales. Aunque Suecia desestimó los cargos, la justicia británica negó en febrero sus pedidos de libertad debido a que consideró que había incumplido las condiciones de la libertad bajo fianza.
Assange cree que si sale del edificio será detenido y luego enviado a EE.UU. para ser procesado por las actividades de Wikileaks, plataforma que reveló miles de documentos secretos de las guerras de Irak y Afganistán.
En la entrevista, Moreno informó que se han realizado gestiones con el gobierno británico para avanzar en las posibilidades de salida del australiano, pidiendo "respeto al derecho humano, a la vida del señor Assange, que se nos garantice su vida, que se nos garantice que no va a ser extraditado a ningún país en que corra peligro su vida o haya pena de muerte".
En ese sentido, sostuvo que "nos enviaron una comunicación oficial del gobierno británico indicándonos que la constitución de Gran Bretaña impide que una persona pueda ser extraditada a un sitio donde corra peligro su vida".
"Está hecho el camino como para que el señor Assange tome la decisión de salir a una casi libertad... porque él no se presentó a los juzgados británicos y tiene que pagar una pena no larga por aquello. Eso lo decidirá la justicia británica", añadió.
Poco antes de sus declaraciones, se dio a conocer que el Mandatario designó al veterano diplomático,
Jaime Alberto Marchán Romero (71), como nuevo embajador de su país en el Reino Unido. Una misión cuyo
principal propósito será resolver el caso del periodista australiano asilado.
Su nominación de produce semanas después de conocerse el cese del anterior embajador Carlos Abad, que ocupaba el cargo desde 2015, y según fuentes diplomáticas, el nuevo embajador es parte del círculo más íntimo del ministro de Exteriores, José Valencia, cuentando con su "confianza personal".
Conversaciones con Manafort
Por último, el gobernante ecuatoriano negó una publicación del New York Times, que aseguraba que Paul Manafort, ex asesor del Presidente de Estados Unidos, Doanld Trump, habló con Moreno en Quito sobre el tema Assange.
"Es mentira" replicó Moreno, asegurando que Manafort fue a Ecuador para gestionar negocios de compañías chinas. Auqnue reconoció que habló con él, aseguró que "jamás se tocó el tema de Julian Assange".
