Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de Violencia (en la foto), entregó el último informe de la ONG.
EFE
CARACAS.- Venezuela registró durante este 2018 una tasa de 81,4 homicidios por cada 100.000 habitantes, que totalizan 23.047 muertes violentas que sitúan al país como la más peligrosa de América Latina, de acuerdo con un informe que presentó este jueves la ONG Observatorio Venezolano de Violencia (OVV).
El documento, que presenta la OVV cada año, se elaboró atendiendo a factores como homicidios "reconocidos así por las autoridades", muertes de delincuentes en enfrentamientos con las fuerzas del orden así como "muertes en averiguaciones".
"Los resultados de este año muestran una disminución en la cifra de homicidios cometidas por los delincuentes y
un notable incremento de las víctimas caídas a manos de las fuerzas policiales", dijo el profesor Roberto Briceño León, que coordina el estudio en el que participan las principales universidades del país.
"Venezuela se ubicará como el país más violento de América Latina", añadió al aseverar que las 81,4 muertes violentas por cada 100.000 habitantes constituyen "prácticamente el doble de lo que se espera en Honduras".
El experto adelantó que el "exterminio" de los delincuentes a manos de policías podría servir de hipótesis para explicar la disminución de la tasa de homicidios, que en 2017 se estacionó en 89 muertes violentas por cada 100.000 habitantes y venía ya de un ligero descenso con relación a 2016.
Dijo también que muchos delincuentes han emigrado, puesto que sus actividades dejaron de ser rentables en Venezuela, un país que atraviesa una severa crisis económica.
Según los datos de la OVV, Venezuela padece una "epidemia de violencia" en todas sus entidades, puesto que la región con el menor índice de muertes violentas, el estado de Mérida (suroeste), presenta 24 homicidios por cada 100.000 habitantes, una cifra que dobla el umbral establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los estados más violentos son, por su parte,
Aragua y Miranda -dos entidades del centro-norte venezolano- con 168 y 124,4 homicidios respectivamente.
Con todo, Briceño León aseveró que las cifras que presentó son "bastante conservadoras" respecto a la "cifra negra (extraoficial) de homicidios", y señaló que muchos de los delitos han dejado de asentarse en los archivos policiales, lo que no dudó en calificar como "censura" de ingreso de data.
El documento de la OVV indica además que la mayoría de los homicidios se cometen "en plena calle" contra hombres, con el uso de armas de fuego y durante las noches de los fines de semana.