CIUDAD DEL VATICANO.- Un joven chileno víctima de abusos leyó su desgarrador testimonio durante la celebración penitencial que se ofició este sábado en la cumbre vaticana sobre protección de los menores y recordó a los obispos que "un abuso, de cualquier tipo, es la mayor humillación que un individuo puede sufrir".
"Uno debe enfrentarse al hecho de tener conciencia de no poder defenderse de la fuerza superior del agresor. No se puede escapar de lo que sucede, pero se debe soportar, no importa lo feo que sea", sostuvo el joven que ahora vive en Alemania.
Emocionado, de forma anónima contó en la Sala Regia del Vaticano donde se llevó a cabo la celebración penitencial, que "lo que llevas dentro es como un fantasma, que los demás no pueden ver" y lo que más duele es "la certeza de que nadie te comprenderá. Esa certeza permanece contigo por el resto de tu vida".
"Desearía que los agresores pudieran entender que son capaces de crear esta división en las víctimas. Por el resto de nuestras vidas", manifestó a los participantes en esta reunión histórica en la que la Iglesia ha abordado durante tres días los abusos a menores por parte del clero.
El que ha sido el octavo testimonio que han escuchado los 190 representantes de la jerarquía de la Iglesia católica, agregó: "Yo puedo y debo estar aquí. Esto me da valor. Ahora se ha acabado. Puedo seguir adelante".
Tras su testimonio, el joven, que es violinista, interpretó una pieza de Bach ante los obispos presentes y el papa Francisco.