Sergei Lavrov, ministro de Asuntos Exteriores de Rusia.
AFP
MOSCÚ.- El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, y el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, debatieron por teléfono la actual crisis política abierta en Venezuela, según confirmó este sábado ese Ministerio a la agencia oficial de noticias RIA Novosti.
Durante la comunicación, Lavrov transmitió a Pompeo su decepción ante "las amenazas vertidas por Estados Unidos" contra el Gobierno del Presidente venezolano, Nicolás Maduro, en la primera conversación diplomática desde que el Gobierno de Estados Unidos anunciara ayer la inclusión de seis mandos policiales y militares de Venezuela en su lista de sanciones.
"La conversación se ha centrado en la situación en torno a Venezuela. Lavrov condenó las amenazas estadounidenses contra su Gobierno legítimo, lo que constituye una injerencia flagrante en los asuntos internos de un Estado soberano y una grave violación del derecho internacional", según el comunicado.
Según el canciller ruso, la influencia externa destructiva de la potencia norteamericana bajo el "pretexto hipócrita de ayuda humanitaria" no tiene nada que ver con el proceso democrático, añadió en respuesta al contingente humanitario promovido por el líder opositor Juan Guaidó, que el Gobierno venezolano considera, en realidad, la punta de lanza de una intervención militar.
Los castigos anunciados este viernes por el Departamento del Tesoro norteamericano van dirigidos contra el comandante de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), Richard Jesús López Vargas, así como a mandos militares responsables de la seguridad en áreas fronterizas -Jesus María Mantilla Oliveros, Alberto Mirtiliano Bermúdez Valderrey, José Leonardo Norono Torres, José Miguel Domínguez Ramírez y Cristhiam Abelardo Morales Zambrano-.
La medida, que implica la congelación de los bienes que los seis afectados puedan tener bajo soberanía de Estados Unidos y prohibiciones de viaje, va en la línea con la presión que el Gobierno de Donald Trump quiere ejercer contra el de Nicolás Maduro, al que acusa de actividades corruptas y de violar los Derechos Humanos.
Trump fue el primer líder extranjero en reconocer a Guaidó como Presidente encargado de Venezuela, cuando este último dio un paso al frente el 23 de enero. Dentro de este apoyo político, también ha colaborado con la ayuda humanitaria que el jefe de la Asamblea Nacional venezolana intentó introducir en el país sudamericano el pasado fin de semana.