MADRID.- Las autoridades de Nigeria anunciaron este jueves el fin de las operaciones de búsqueda y rescate en el edificio derrumbado el miércoles en la ciudad de Lagos (suroeste), un suceso que se ha saldado con alrededor de una decena de muertos.
El director de la Agencia de Gestión de Emergencias del Estado de Lagos (LASEMA), Adeshina Tiamiyu, destacó que las tareas han concluido pues no quedarían sobrevivientes entre los escombros.
Asimismo, negó las informaciones sobre la presencia de cerca de un centenar de alumnos en una de las plantas del edificio, que acogía una escuela, según ha recogido el diario nigeriano 'Punch'. "Vi una fotografía del edificio antes del derrumbe y puedo confirmar que el piso que acogía la escuela no puede acomodar a cien estudiantes", sostuvo.
Aún no existe una cifra oficial de víctimas fatales o de sobrevivientes actualizada. La noche del miércoles las autoridades dijeron que 37 personas fueron sacadas de las ruinas y que alrededor de ocho habrían fallecido en el derrumbe. Sin embargo, todavía una cantidad desconocida siguen desaparecidas.
El edificio siniestrado está ubicado en la zona de Ita Faji, en el corazón de la capital comercial de Nigeria, y se derrumbó por causas que se desconocen.
El gobernador de la provincia de Lagos, Akinwunmi Ambode, dijo que el edificio había sido marcado para demolición y que era registrado como residencial, por lo cual el funcionamiento de la escuela en los dos pisos superiores era ilegal, consignó la agencia AP.
Por su parte, el Presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, se mostró "extremadamente triste" por el suceso. "Es conmovedor perder preciadas vidas en cualquier caso, pero particularmente cuando son tan jóvenes y tiernas", sostuvo.
"Encargo al gobierno del Estado de Lagos que haga todo lo necesario para evitar que se repitan acontecimientos así de trágicos", agregó el Mandatario a través de su cuenta en la red social Twitter.
El derrumbe de edificios es habitual en Lagos, donde la normativa que regula la edificación es laxa. En septiembre de 2014 murieron 115 personas a causa del derrumbe de una pensión en la ciudad.
