La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) agregó a Nicaragua en la lista negra de violaciones a los Derechos Humanos, según su informe anual presentado el jueves, después de que en diciembre un grupo de expertos denunció que en la represión de las protestas se cometieron crímenes de lesa humanidad.
"La CIDH ha seguido con especial atención el progresivo deterioro de la situación de los Derechos Humanos en Nicaragua, en particular desde el inicio de los actos de violencia ocurridos a partir del 18 de abril de 2018 en el marco de la represión estatal a las protestas", dijo el organismo que no había reprobado al país en 25 años.
En el informe de este ente autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), Cuba y Venezuela repiten en el apartado de Estados que reprueban en el cumplimiento de los DD.HH.
La presidenta de la CIDH, Esmeralda Arosemena, explicó a AFP que para que un país entre en esta categoría se han de registrar "una multiplicidad de violaciones" a los derechos humanos, de una forma "sistemática" y "continua".
La ola de manifestaciones en Nicaragua que comenzó como un movimiento contra una reforma de la seguridad social y derivó en un momento de protesta más amplio contra el gobierno fue duramente reprimida con un saldo de 325 muertos, 2.000 heridos y 52.000 exiliados, según organismos.
La CIDH también denunció la obstaculización de la atención médica a los manifestantes, detenciones arbitrarias, estigmatización, medidas de censura y amenazas contra líderes de movimientos sociales. También señaló la "falta de diligencia" en las investigaciones de los asesinatos.
Para el organismo, en la actualidad "existe una ausencia del Estado de Derecho" y una falta de una separación efectiva de los poderes estatales. Agregó que "se registraron nuevos y graves episodios de ataques, persecución y encarcelamiento a políticos opositores, disidentes, periodistas, manifestantes" y que se continúan registrando muertes en las protestas.