El ex obispo de una diócesis de Virginia Occidental ha sido acusado de abusar sexualmente de adolescentes y de hombres adultos.
Un ex monaguillo demandó a la diócesis de Wheeling-Charleston y a su antiguo líder, Michael Bransfield, la semana pasada, afirmando que fue agredido sexualmente en el 2014 y acosado durante años.
Según la denuncia, Bransfield se tomaba media botella de licor Cointreau todas las noches y abusaba sexualmente de los seminaristas.
El año pasado, la diócesis publicó una lista de 31 prelados acusados de forma creíble de conducta sexual desde los años cincuenta. Bransfield no estaba en la lista.
Hace unos días, en tanto, la fiscalía general del estado demandó a la diócesis y a Bransfield, acusándolos de encubrir conductas ilegales. La entidad religiosa se negó a formular comentarios al diario The Intelligencer.
Bransfield renunció en septiembre en medio de acusaciones de mala conducta sexual.