Un tribunal egipcio confirmó este miércoles la pena de muerte para dos monjes cristianos por el asesinato de un obispo en 2018, después de que el muftí del país emitiera un dictamen aprobándola.
La ley egipcia impone a los jueces obtener la opinión no vinculante del gran muftí de Egipto, un jurisconsulto musulmán que confirma casi sistemáticamente las condenas a muerte.
La justicia egipcia condenó en febrero a muerte a estos dos monjes coptos ortodoxos, un caso que estremeció a esta importante comunidad cristiana de Egipto en el verano boreal de 2018.
El obispo Epifanius, de 68 años, dirigía el monasterio de San Macario, en Wadi Al Natrun, al noroeste de El Cairo. Su cuerpo fue hallado a fines de julio en un corredor del monasterio con heridas en la cabeza, según la Iglesia.
La fiscalía acusó a los monjes Isaías Al Makari y Filotheos al Makari de haberse puesto de acuerdo para matar al obispo, debido a divergencias no explicadas.
Los coptos representan un 10% de los 100 millones de egipcios. Suelen sufrir las violencia de extremistas, especialmente del grupo Estado islámico.
