La explosión del uso de este tipo de aparatos hizo al Gobierno de Macron imponer medidas. Los partes por transitar en las veredas son de 135 euros (102 mil pesos chilenos).
Los tiempos de los paseos con scooters a altas velocidades tienen los días contados en Francia. El Gobierno de Emmanuel Macron anunció la inclusión en el código de circulación de los scooters eléctricos y otros dispositivos similares de movilidad alternativa. A partir de septiembre se impondrán las restricciones y limitaciones de su uso bajo fuertes multas.
Tal y como desde noviembre de 2018 se regulan los ciclos en Chile con la ley de Convivencia Vial (de Modos). La regulación en nuestro país limita la velocidad máxima de los autos a 50 km/hra, exige el uso de cascos y vestimenta reflectante en ciclos, y prohíbe el uso de veredas para el tránsito de bicicletas y scooters, que tienen por obligación que utilizar ciclovías y la acera.
Por su parte, en Las Condes ya se han entregado, a la fecha, 643 partes de cortesía que a partir del jueves pasado pasaron a ser partes reales para quienes infrinjan esas normativas.
Volviendo a Francia, entre las principales medidas implementadas se encuentra la limitación a 25 km/hr de la velocidad máxima de estos dispositivos, que además tendrán prohibido circular por las veredas, salvo algunas excepciones señaladas por la intendencia. Ahí donde existan, deberán transitar por las ciclovías, y si no en las rutas que tengan una velocidad máxima de 50 km/hra.
La rápida expansión de scooters eléctricos, como en el resto del mundo, es una "buena noticia" porque "responde a una necesidad de movilidad", y además "no contaminan", dijo la ministra de Transporte francesa, Elisabeth Borne.
Pero al mismo tiempo, agregó, que su desarrollo ha sido "un poco anárquico" y el uso de estos dispositivos por las calles de las ciudades de todo el país, especialmente en París, se convirtió en una especie de "ley de la jungla" que hacía necesaria su regulación. Algo que en lo que trabajó de forma conjunta su ministerio y el del Interior, con el resultado de la inclusión de estos dispositivos en el código de circulación.
El uso de scooters eléctricos y otros dispositivos en Francia quedará prohibido para los menores de ocho años y hasta los 12 años, los niños deberán portar casco.
El scooter será además de uso exclusivamente personal, es decir, no se podrá llevar a un pasajero, como es habitual ver en ciudades como París. También queda prohibido el uso de cascos de música o cualquier aparato que limite la capacidad auditiva del conductor. Los scooters deberán además estar equipados con luces delanteras y traseras y, durante la noche o en momentos de poca visibilidad, sus usuarios deberán portar algún elemento reflectante.
102mil pesos es el valor de las multas a scooters por circular en las veredas de Francia
La nueva normativa también hace referencia a un problema recurrente en las ciudades: el estacionamiento descontrolado de estos dispositivos, que hace que de vez en cuando bloqueen las veredas o accesos peatonales, algo que estará prohibido con una pena de multa.
Las multas van desde los 35 euros (27 mil pesos) si no se respetan las reglas de circulación y son de 135 euros (102 mil pesos) si se circula por una vereda no autorizada. Conducir estos dispositivos a más de 25 kilómetros por hora tiene una sanción de 1500 euros (1.385.000 pesos).
Los scooters eléctricos han vivido una fuerte expansión en Francia los últimos dos años. Según la Federación de Profesionales de la Micromovilidad francesa, la venta aumentó un 129% en 2018, llegando hasta los 232.749 dispositivos, algo que por una parte se debe a que son más accesibles: el precio medio es de 490 euros (370 mil pesos). A ellos se unen los scooters eléctricos de de las aplicaciones que se encuentran en las principales ciudades del país, donde ofrecen sus servicios diez operadores distintos, a diferencia de los dos con los que cuenta Chile.
Esta es una situación que ha llevado a grandes ciudades como París a adelantarse a las disposiciones generales anunciadas.
