Ya es oficial. El Gobierno de Argentina habilitó este martes el uso de las pistolas Taser o armas de descarga eléctrica por parte de las fuerzas de seguridad. Una medida polémica que desató un duro debate al interior del país y generó la preocupación de diversas organizaciones ciudadanas.
Mediante la publicación de una resolución firmada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en el Boletín Oficial, el Gobierno de Mauricio Macri activó la medida en conjunto con un reglamento correspondiente que estipula los casos en los que los agentes podrán emplear las armas no letales, consignó el diario trasandino La Nación.
"La incorporación de armas electrónicas de uso no letal permitirá abordar situaciones operacionales en las que resulte necesaria la utilización de la fuerza sin el empleo de armas de fuego, siendo un medio intermedio para ejercer un uso racional y gradual de la fuerza ante situaciones de enfrentamientos con personas violentas o amenazantes, brindando a las fuerzas una opción táctica adicional en reemplazo de las armas de fuego", indica la resolución.
La confirmación de la medida, que forma parte de una serie de propuestas de seguridad impulsadas por el Ejecutivo, llega luego de que en enero recién pasado la ministra Bullrich anunciara la
compra de 300 pistolas Taser. En aquella ocasión informó que, en principio, éstas serán portadas por personal de seguridad en aeropuertos y terminales de trenes, donde se concentra una mayor cantidad de personas.
"Las armas electrónicas no letales de tipo 'Taser' se incorporan en el cuidado de la ciudadanía. Hoy se dictó el reglamento de uso. ¡Un paso más contra la delincuencia!", escribió la secretaria de estado este martes, al anunciar la entrada en vigencia del reglamento.
Sin embargo, este tipo de armas no letales han sido rechazadas por diversos organismos del mundo, por su posible utilización como método de tortura. El defensor del Pueblo adjunto de la Ciudad de Buenos Aires, Gabriel Fucks, sostuvo en enero que la utilización de estas pistolas forma parte de "prácticas policiales contrarias a los acuerdos internacionales" y calificó la compra como "un despropósito". "Constituye un peligroso efecto sobre el accionar judicial para que no investiguen los casos de gatillo fácil", añadió.
En respuestas a estas críticas, en la resolución publicada este martes, según constata el diario Clarín, también se consigna que los dispositivos cuentan con una especie de "caja negra" y que, por lo tanto, luego de que un agente utilice el arma electrónica se procederá a "preservar la memoria interna del material utilizado, a los efectos de efectuar el pertinente control administrativo".
Asimismo, el Ejecutivo fundamenta la normativa con los resultados obtenidos de estudios médicos realizados en universidades como la de California (UCSD) y Winston-Salem, en Estados Unidos, y por el Instituto de Medicina Legal de Málaga, España. “Se concluye que el empleo de las armas electrónicas no tiene efectos letales sobre las personas", afirma.
Cuándo y cómo podrán ser usadas
En la resolución 395/2019 se estipula en que los agentes podrán hacer uso de las pistolas Taser en tres situaciones: en primer lugar, el arma podrá ser empleada para inmovilizar, proceder a la detención o para impedir la fuga de quien manifieste peligro inminente de lesionar a terceras personas o de auto lesionarse; en segundo, cuando deba ejercerse la legítima defensa propia o de terceras personas, y por último, para impedir la comisión de un delito de acción pública.
Además, en el anexo de la resolución, el Gobierno remarcó que los agentes podrán utilizar las armas de descarga eléctrica "cuando resulten ineficaces otros medios no violentos" y solo las utilizarán aquellos integrantes de las fuerzas policiales y de seguridad federales "que hayan sido especialmente instruidos para su empleo, luego de haber recibido la capacitación específica".
