Un hombre de 36 años fue detenido este lunes cuando trataba de ingresar con un revólver a la Casa Rosada, sede del Gobierno argentino en Buenos Aires, donde pedía tener una audiencia con el Presidente Mauricio Macri.
Personal de seguridad de la sede de Gobierno, que depende de la Casa Militar, detuvo y puso a disposición policial a Francisco Ariel Muñiz, quien, "aduciendo tener una audiencia" con el Mandatario, intentó ingresar con un arma de fuego en su portafolio.
"Al constatarse que la audiencia con el Presidente no existía, el hombre intentó dejar el maletín que contenía un revólver Magnum 44 Taurus", añadió la Presidencia de Argentina en un comunicado.
Según agregaron desde el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, cuando el hombre se acercó a la reja de la Casa Rosada -que cerca el edificio- y pidió ver al Mandatario, personal de la Policía Federal (PFA) le indicó que "no eran los medios ni la forma, lo que generó el descontento del hombre, quien de manera imprevista arrojó una caja plástica de pequeña dimensión dentro del predio".
Muñiz "se alejó caminando", aunque fue detenido a pocos metros por el personal de la PFA en cooperación con la Policía de la Ciudad.
La brigada de explosivos determinó que
en el interior de la caja se encontraba el arma, y la Policía científica desplegó un operativo para estudiar el revólver.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, explicó tras la reunión del gabinete ministerial de hoy que lo primero que el detenido dijo fue que quería "llamar la atención", porque ya había pedido varias entrevistas con el Presidente y en todas había sido derivado a lugares "adecuados de acuerdo a lo que había pedido".
Según reveló a las autoridades, tenía un "problema de vinculación" con su hija, a la que hacía cuatro años que no veía y Bullrich añadió que también había tenido una relación superficial con el PRO, el partido al que pertenece Macri, lo cual utilizaba como mecanismo para pedir una entrevista con el jefe de Estado.
"El año pasado ya había enviado un regalo un poquito extraño: un hacha. Es decir, que a la persona, evidentemente, habrá que hacerle análisis psiquiátricos", manifestó Bullrich.
Este hecho se da casi dos años después de que un hombre con problemas psiquiátricos tratara también de burlar la seguridad del edificio al chocar contra las rejas de la Casa Rosada durante la madrugada, unas imágenes que fueron muy difundidas por la prensa local.
También en noviembre pasado, cuatro jóvenes fueron detenidos y posteriormente liberados por intentar entrar con un automóvil a una residencia de descanso de Macri, que habían dado como excusa que una de ellos era la ahijada del Mandatario.
Habían conseguido pasar el primer control de acceso a la quinta, en momentos en que el Presidente descansaba con su familia.
Sin embargo, cuando los agentes de seguridad se dieron cuenta del engaño e intentaron detenerlos, la conductora del auto dio marcha atrás y abandonó el lugar, lo que derivó en una persecución por parte de la Policía.
Finalmente, los cuatro fueron detenidos en el estacionamiento de un restaurante de comidas rápidas.
Además de situaciones como estas, el jefe de Estado ha recibido diversas amenazas a través de redes sociales y por teléfono, como cuando en agosto de 2017 un hombre de 26 años fue detenido acusado de haber amenazado con "reventar" su casa.
La imagen de Macri ha caído fuertemente en las encuestas en los últimos meses, en los que se ha agravado la crisis económica que vive el país desde que a finales de abril de 2018 comenzó una abrupta devaluación del peso que elevó la inflación y desencadenó en una recesión que aún continúa.