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Cómo es el USS John S. McCain, el barco de guerra que protagoniza la nueva polémica de Trump

Son tres generaciones de una misma familia las que le han dado el nombre a esta nave, apodada como "Big Bad John". Ésta ha servido en varias operaciones en regiones de Asia, tiene un sistema de misiles particular y sufrió un mortal accidente en 2017.

30 de Mayo de 2019 | 10:55 | Redactado por D.Gaete, Emol
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EFE
Un nuevo episodio polémico enfrenta el Gobierno de EE.UU. de Donald Trump y tiene un claro protagonista: el buque de guerra USS John McCain. La supuesta decisión de la Casa Blanca de mantener la nave escondida durante la estadía del Mandatario en Japón, causó revuelo tanto a nivel interno como en el exterior, e hizo recordar sus disputas con el fallecido senador del mismo nombre.

The Wall Street Journal reveló que un encargado militar envió una solicitud para ocultar la nave, también conocida como DDG 56 y que es parte de la Séptima Flota, la fuerza naval más importante de EE.UU., en señal de las constantes disputas que tuvo Trump con McCain durante la campaña presidencial de 2016.

Pero no se trata de un simple buque, ya que está ubicado en una zona estratégica, considerando las últimas tensiones internacionales que ha protagonizado Washington.

Herencia familiar

El USS John McCain se encuentra en el puerto japonés de Yokosuka y fue construido en 1991 por la Bath Iron Work -una de las empresas constructoras de buques más importantes de EE.UU.- en Maine para ser puesto a disposición en 1994.

Tiene una longitud de 154 metros, alcanza una velocidad máxima de 30 nudos y pertenece a una clase de destructores que tiene un característico sistema de defensa de misiles, que lo hace ser considerado como uno de los buques que puede responder a la amenaza que presenta Corea del Norte.

Su nombre se debe al abuelo y al padre del recientemente fallecido senador John S. McCain, también del mismo nombre, que han sido condecorados y recordados por sus notables participaciones en la Segunda Guerra Mundial. Es más, se convirtieron en el primer padre e hijo en la historia naval que llegaron a ser almirantes.

En el año 2018, el nombre del senador también se sumó a los homenajeados en el barco, en respuesta por su participación en la Guerra de Vietnam.

"Big Bad John" es el nombre que su tripulación le ha impuesto, haciendo alusión al combativo espíritu de los McCain, y su lema: "La fortuna favorece a los valientes". Ha participado en el Golfo Pérsico para apoyar a las fuerzas en la región y también otras operaciones en Timor Oriental, cuando este país se independizó, y en varias regiones de Asia.

Son 23 oficiales, 24 suboficiales y 291 marineros los que dan vida al USS John McCain, que tuvo un importante accidente en agosto de 2017, cuando el buque chocó con un barco petrolero al este de Singapur. Tras esta colisión, la nave sufrió una importante abolladura en su línea de flotación y diez marineros fallecieron en el incidente.

Incidentes con Trump

"El USS John McCain no debe quedar a la vista", habría sido la decisión de la Casa Blanca previo a la llegada de Donald Trump a Japón, según The Wall Street Journal. Una idea que tiene una importante historia detrás: las rencillas entre el Mandatario y el ex senador.

En 2015, Trump se burló del estatuto de héroe de guerra de Vietnam que posee McCain, quien fue retenido como prisionero por cinco años durante el conflicto.

"No es un héroe de guerra; solo lo es porque fue capturado: prefiero a los que no han sido capturados", dijo en 2015.

Estas palabras no fueron acogidas de buena forma por el referente republicano y ex candidato presidencial en 2008, quien falleció en 2018 a los 81 años por un cáncer cerebral.

Anteriormente, Trump ya había calificado a McCain de "tonto" luego de que el senador le dijera que había "encendido a los locos" por sus intenciones antimigratorias, lo cual motivó las rencillas entre ambos. Todas estas diferencias motivaron al entonces senador a no apoyar la candidatura presidencial del ex magnate, desatando otra polémica.

Y fue tal la ruptura, que el mismo McCain pidió, antes de morir, que el Mandatario no asistiera a su funeral. Así, pese a su deceso, la rencilla persiste y ahora ha marcado a la Administración Trump.
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