Los mandatarios de EE.UU. y Corea del Norte se reunieron por primera vez en junio del año pasado en Singapur.
AFP
El Presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó hoy que se va a reunir brevemente con el líder norcoreano, Kim Jong-un, cuando visite en las próximas horas la zona desmilitarizada (DMZ) que divide las dos Coreas.
"Voy a hacer una declaración muy breve, porque nos vamos a la DMZ donde me voy a reunir con el líder supremo Kim Jong-un", explicó Trump en una rueda de prensa realizada al término de su cumbre en Seúl con su homólogo surcoreano, Moon Jae-in.
La reunión entre Trump y Kim no se había confirmado oficialmente hasta ahora, ya que el Mandatario estadounidense propuso el encuentro a través de Twitter, oferta que Pyonyang no había aceptado formalmente pese a calificarla de "muy interesante" y positiva para las relaciones bilaterales.
"Tenemos una buena relación. Nos entendemos y eso puede llevar a cosas buenas", añadió Trump durante la rueda de prensa.
El Presidente explicó que la reunión de hoy "solo es un paso, puede ser un buen paso o no. Pero creo que va a ser muy importante".
"Lo había planeado hace tiempo pero tuve la idea ayer de proponer que nos saludemos y nos demos un apretón de manos, porque no nos vemos desde Vietnam, donde celebramos una gran reunión", dijo Trump en referencia a la cumbre de Hanói en febrero, en la que ambos líderes no se pusieron de acuerdo sobre el modelo de desnuclearización.
El inquilino de la Casa Blanca consideró que se alabó mucho la primera cumbre que ambos mantuvieron en Singapur en junio de 2018, aunque consideró que la de Hanói "fue mejor en términos de lo conseguido".
En la capital vietnamita, Pyonyang abogó por una desnuclearización gradual acompañada del progresivo levantamiento de sanciones, una oferta que Washington -que sostiene que no relajará sanción alguna mientras el régimen no elimine sus programas nuclear, de misiles y de armas químicas y biológicas- consideró inaceptable.
Trump también recordó que al inicio de su presidencia, en 2017, hubo mucha tensión en la península debido a los repetidos test de armas norcoreanos y a las beligerantes respuestas que daba en Twitter.
"Al principio había mucha ira entre yo y Kim Jong-un pero en un momento dado las cosas cambiaron entre nosotros", explicó, añadiendo que ambas Coreas viven ahora una mejor situación en términos de seguridad porque Pyonyang no está haciendo test nucleares o de misiles.
Por su parte, Moon Jae-in aseguró que Trump y él están "en la misma página en cuanto a desnuclearización", subrayó el peso de la alianza entre Seúl y Washington y destacó el hecho histórico de que por primera vez líderes de EE.UU. y Corea del Norte se vayan a ver en la frontera que divide ambas Coreas, que permanecen en guerra desde hace casi 70 años.