Profesores que se niegan a entregar las notas, una filtración de los exámenes y varios detenidos por presunto fraude. Las pruebas del bachillerato en Francia, que son objeto de una polémica reforma que entrará en vigor en 2021, estuvieron plagadas de incidentes este año.
"¿2019, una edición maldita?", se preguntaba el viernes el diario en línea Huffington Post, que enumeraba la lista de percances que hicieron sudar la gota gorda a los miles de estudiantes inscritos al baccalauréat, o "bac", como se le conoce a esta prueba de evaluación final de los estudios secundarios.
Se trata de un sistema creado por Napoleón en 1808, considerado un pilar fundamental de la educación francesa. Basta con pasarlo para poder postular a una universidad y para lograrlo se necesita una nota superior o igual a 10/20. En 2018, 88,3% de los estudiantes de secundaria obtuvieron el preciado título.
743.000 estudiantes se inscribieron para los exámenes de bachillerato este año
"El codiciado diploma no es sólo el prerrequisito para cursar estudios terciarios.
Es un rito de iniciación que permite al francés convertirse en adulto, una tradición anual que tiene lugar en los albores de solsticio de verano boreal y en el que participa toda la tribu francesa", describió Radio Francia Internacional hace algunos años.
Aunque la mayoría de las ediciones suelen estar marcadas por una que otra polémica, la versión de este año parece haber sido especialmente controvertida, en gran parte, por una huelga contra el Presidente Emmanuel Macron y algunas filtraciones.
Sin resultados
La confusión era palpable el viernes en varios colegios de secundaria de todo el país. Miles de estudiantes que esperaban sus notas recibieron únicamente resultados provisionales, debido a una huelga de profesores que se niegan a comunicar las calificaciones.
Los huelguistas intentan presionar al Gobierno para que reabra las negociaciones sobre la reforma al "bac", con la que se busca que las evaluaciones de los alumnos en el transcurso del año escolar tengan más peso que la "reina" de las pruebas.
"Tengo dudas. Me siento estresada e indignada. Estudiamos dos o tres meses y ahora no sabemos si nuestro esfuerzo al final va a haber valido de algo"
Victoire, estudiante
La modificación es parte de las promesas electorales de Macron, quien llegó al poder en 2017 y estima que el bachillerato, tal y como estaba concebido hasta ahora, no prepara adecuadamente a los adolescentes para la universidad y el mercado laboral. Para los opositores, no obstante, este cambio acabará con el carácter nacional del diploma de estudios secundarios.
Según informó el ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer, que tildó la manifestación de "sabotaje", unos 700 correctores, de los 175.000 que participan en el examen, mantienen retenidas unas 30.000 pruebas de un total de 4 millones. La mayoría de los afectados se encuentra en zonas de Créteil y Versalles (cerca de París), y en las ciudades de Dijon (centro-este) y Toulouse (suroeste).
Como medida de contención, los estudiantes recibieron el viernes una puntuación provisional en función de sus resultados de rendimiento durante el año. Su calificación final será ajustada una vez que los exámenes faltantes sean devueltos.
Sin embargo, varios alumnos temen quedar en medio de la disputa entre el Ejecutivo y los profesores, y recibir resultados "falseados". "Como muchos de mis compañeros, tengo dudas.
Me siento estresada e indignada. Estudiamos dos o tres meses y ahora no sabemos si nuestro esfuerzo al final va a haber valido de algo", protestó Victoire, estudiante del instituto secundario La Bruyère, en Versalles.
En el colegio público Camille-Sée, en el distrito 15 de París, tampoco escondieron su decepción. Allí, 200 de los 700 alumnos recibieron resultados provisionales de sus exámenes de filosofía y física, señaló su director Pierre-Luc Masson.
Alexandre, fue parte de la lista. Obtuvo su bachillerato con un promedio de 10,5, pero dice estar "decepcionado" porque su nota provisional en filosofía solo alcanzó el 08/20. Cree que le fue bien en la prueba del mes pasado, así es que cruza los dedos mientras espera la nota final.
Filtraciones
A esta huelga, que podría exponer a los profesores a sanciones, se suma una investigación por presunto fraude, luego de que se diera a conocer que las preguntas de la prueba de matemáticas circularon masivamente por Whatsapp.
En total, 21 personas han sido detenidas desde este martes por la filtración, pero 17 han sido liberadas. Cuatro, incluyendo dos estudiantes y dos adultos, podrían ser imputados por fraude, abuso de confianza y conspiración, según informó la fiscalía de París. Los adultos son un hombre que trabaja como supervisor en un establecimiento y su pareja. Ambos habrían vendido las preguntas de la prueba.
Sin embargo, dada la
"naturaleza extremadamente limitada de esta filtración", las autoridades educativas francesas decidieron no cancelar, por el momento, el examen de matemáticas.
No es primera vez que ocurren filtraciones. En 2011, un día antes de del examen de matemáticas, una persona publicó en internet un ejercicio que figuraba en la prueba. La pregunta fue anulada y cuatro jóvenes fueron condenados a entre tres y cuatro meses de cárcel en suspenso.
Para rematar la mala racha de este año, los resultados de la prueba se dieron a conocer por error en la página de la academia de Lille (norte) el jueves en la noche, varias horas antes de la publicación oficial de las notas.
Los exámenes "bac" se rindieron a mediados de junio pasado, con 743.000 alumnos escritos. Pese a las polémicas que siguen marcando la versión 2019, en el Gobierno ven la situación con calma. "Cada año, hay un pequeño problema en algún lado", minimizó el ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer.