La intercepción por parte de las autoridades británicas de un petrolero iraní frente a Gibraltar "no quedará sin respuesta", dijo este lunes el ministro de Defensa Amir Hatami.
"No toleraremos" la captura del petrolero "Grace 1" ocurrida el jueves frente al territorio británico de Gibraltar, en el extremo sur de España, declaró el ministro citado por la agencia de prensa semioficial ISNA y también la agenda Tasnim.
Esta operación "no quedará sin respuesta", añadió.
No fue el único responsable iraní en criticar la intercepción del buque sospechoso de trasladar crudo a Siria lo que, según Londres, violaría las sanciones impuestas a Damasco.
El ministro de RR.EE., Mohamad Javad Zarif, advirtió que la acción "crea un peligroso precedente" y recordó que su país "no es miembro de la Unión Europea ni está sujeto a ningún embargo petrolero europeo" con lo que no se vería sujeto a las sanciones comunitarias contra Siria.
En un comunicado publicado el lunes, el Gobierno de Gibraltar reafirmó que el Grace 1 había sido interceptado "en las aguas territoriales británicas de Gibraltar" después de haber "abandonado aguas internacionales" para reabastecerse.
La diplomacia iraní había asegurado que la operación se había producido en aguas internacionales.
Además, el viceministro iraní de RR.EE., Abbas Araghchi, dijo el domingo que el destino del petrolero no era Siria, país en guerra desde hace ocho años.
Teherán exigió la liberación "inmediata" del navío pero la justicia gibraltareña autorizó su retención hasta el 19 de julio.
Desde 2011, Siria, donde el régimen de Bashar al Asad cuenta con Irán como crucial aliada, es objeto de sanciones internacionales que afectan, entre otros, su sector petrolero.