El Presidente palestino, Mahmoud Abbas, amenazó con dar por terminados todos los acuerdos con Israel, incluido el de seguridad, después de la demolición esta semana de viviendas palestinas en una zona bajo su jurisdicción.
"No sucumbiremos a los dictados y la imposición de un hecho consumado en terreno con fuerza bruta, específicamente en Jerusalén", informó la agencia de noticias Wafa sobre las declaraciones que hizo anoche Abbas una reunión de emergencia.
"Todo lo que está haciendo el estado de ocupación (israelí) es ilegal y nulo", añadió ante autoridades palestinas en la ciudad cisjordana de Ramala.
No es la primera vez que el liderazgo palestino aprueba el cese de los acuerdos con Israel.
La última fue el pasado mes de octubre cuando el Consejo Central de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) anunció el fin de la cooperación de seguridad y sus relaciones económicas con Israel, medidas que hasta ahora no se han aplicado.
En aquella reunión se aludió también a
"la continua negación de Israel de cumplir con los acuerdos firmados y las obligaciones subsiguientes", en referencia a los Acuerdos de Oslo (1993-1995) que crearon una limitada autonomía palestina por un período de cinco años que debería haber avanzado hacia una paz duradera y un estatus final.
En esta ocasión, la amenaza sigue a la demolición de doce edificios palestinos por parte de Israel en las llamadas zonas A y B de Cisjordania que están bajo control total y parcial palestino según los Acuerdos de Oslo.
La zona donde se llevaron a cabo los derribos, Wadi al Hummus, pertenece además al barrio Sur Baher de Jerusalén Este, que no quedó anexionado por Israel, y cuyos permisos de construcción habían sido autorizados por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) al estar bajo su control.
Abbas insistió anoche en que está preparado para alcanzar un acuerdo de paz justo y duradero con Israel pero que eso no significa "aceptar el statu quo o rendirse a las medidas (de la ocupación)".
"No coexistiremos con la ocupación, no aceptaremos el 'acuerdo del siglo' (que elabora la Administración estadounidense de Donald Trump). Palestina y Jerusalén no están a la venta ni en oferta", declaró.
El movimiento islamista palestino Hamas, que controla Gaza, valoró el anuncio como "un paso en la buena dirección".
"La decisión viene en paralelo con los requerimientos del difícil momento que la causa palestina está pasando y que corrige el erróneo camino que ha distorsionado siempre la vía política palestina", declaró hoy en un comunicado.
El Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) también valoró en positivo el anuncio pero añadió que "no es suficiente".