La elecciones primarias argentinas dejaron un claro ganador: con un 47% de los votos, el candidato kirchnerista,
Alberto Fernández, se posicionó como la gran figura de los comicios, dejando a su movimiento en una cómoda posición para los comicios de octubre. No obstante, el líder del
Frente de Todos no fue el único de esta coalición que destacó el domingo, ya que también fue rotunda la victoria por la gobernación de Buenos Aires de
Axel Kicillof, un cercando a la ex Mandataria
Cristina Fernández, capaz de "unir" a la dupla presidencial.
Las encuestas previas situaban a Kicillof como favorito, pero el 49,34% obtenido fue mayor al pensado -se preveía una ventaja entre 4 a 5 puntos-, dejando así en un muy mal pie a la actual gobernadora, María Eugenia Vidal, personaje clave del macrismo considerada una de las protegidas del Mandatario, que también ha reducido sus réditos producto de la crisis económica trasandina.
"Este triunfo significa que la mayoría de los bonaerenses quieren una provincia distinta. La mayoría quiere poner en marcha esta provincia", fue parte del mensaje del vencedor tras conocer los resultados, quien agradeció a "Cristina" y Alberto Fernández, entre otros, por el apoyo que, de paso, dejaría a la ex Presidenta y candidata a vicepresidenta bien posicionada en un triunfo kirchnerista en las presidenciales, debido a su cercanía.
Cercanía con Cristina Fernández
Desde joven, cuando ingresó a la Universidad de Buenos Aires para estudiar en la Facultad de Economía, se interesó por la política. En aquel periodo, en el cual llegaría a encabezar listas universitarias, hizo de manifiesto sus intenciones actuales y que lo llevaron a ser considerado por Cristina Fernández en diversos puestos. En 2011, la entonces Presidenta lo posicionó como secretario de Política Económica y Planificación del Desarrollo y en 2013 lo designó como su ministro de Economía.
De acuerdo con Clarín, la relación entre ambos comenzó tras una reunión en la que hablaron sobre Aerolíneas Argentinas, cuando Kicillof era el CEO de la empresa, y en la cual habría generado una grata impresión a Fernández.
Asimismo, según el mismo medio, en 2012 Kicillof, recién nombrado en su primer cargo gubernamental, habría dicho en una reunión informal que tenía "hipnotizado" a la ahora candidata a la vicepresidencia de Argentina y señaló que era constantemente consultado por Fernández para tomar sus decisiones, ya que sus ideales ligados al keynesianismo le entusiasmaban.
La recuperación de la iniciativa estatal y el estímulo a la demanda interna eran algunos de los puntos que conectaban a ambos y que cimentó la confianza. Algo que hizo elevar su posicionamiento para ser el jefe de la cartera de Economía. "Nunca dudé en aceptar", dijo por ese momento, reemplazando a Hernán Lorenzino, en un álgido momento de ese Gobierno en el que sucedieron varios cambios.
En aquellos años en que integró el Gobierno kirchnerista, fue parte del plan estratégico de la petrolera YPF cuando se manejó la expropiación de la empresa y también encabezó un programa de créditos para la construcción de 400.000 viviendas, entre otras acciones.
Con esta larga lista de trabajos, se espera que Kicillof, si logra imponerse en octubre junto a la dupla Fernández, sea un apoyo claro a la ex Presidenta y haga más cercana la relación entre ambos.
Polémicas
En su búsqueda por ser gobernador de Buenos Aires, Kicillof también ha destacado por alguna que otra intervención que ha llamado la atención, como fue cuando le dijo a María Eugenia Vidal que "la provincia no se gobierna desde Instagram ni desde un helicóptero", respondiendo los dichos que había dicho ella, donde señalaba que "si gana Kicillof, La Cámpora (movimiento kirchnerista liderado por el hijo de Cristina Fernández, Máximo Kirchner) va a gobernar la Provincia".
No han sido pocos los cruces de palabras entre ambos. A finales de julio Kicillof acusó a Vidal de "ocultar o potenciar" las medidas económicas que Macri ha tenido en su periodo y preguntó "¿Por qué Vidal no hace nada para detener un poco la debacle productiva?".
Asimismo, también llamó la atención de la opinión pública cuando en un video se mostró al candidato complicado al intentar distinguir entre naranjas y unas mandarinas.
De todos modos, salió al paso y logró esta sorpresiva victoria que lo tiene ad portas de la gobernación de Buenos Aires y que ahora lo tendrá reunido con Alberto y Cristina Fernández para estudiar las estrategias para octubre.
