El Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, admitió este jueves que no tiene pruebas para acusar a las ONG por los incendios que devastan parte de la Amazonía, pero reiteró que ellas son las "mayores sospechosas" por el desastre causado por la sequía, las altas temperaturas y también por la deforestación.
"Pueden ser hacendados también, todo el mundo es sospechoso, pero la mayor sospecha viene de las ONG", afirmó Bolsonaro a periodistas cuando salía este jueves del Palacio da Alvorada, la residencia presidencial.
"¿Quieren que culpe a los indios? ¿Quieren que culpe a los marcianos? Pero, a mi entender,
un indicio muy fuerte es la gente de las ONG que perdió la 'teta', es sencillo", agregó el gobernante, quien reconoció que no tiene pruebas para sostener su afirmación.
"No se tiene prueba de eso, porque nadie escribe: 'Yo voy a ir a quemar allá'", aseveró el jefe de Estado, que, sin dar detalles, citó imágenes que circulan en redes sociales en las que se ven personas, en automóviles, motocicletas y bicicletas incendiando fácilmente unos bosques.
"No estoy defendiendo incendios ni diciendo que siempre los hubo y los habrá, no es eso. Infelizmente, sucede eso a lo largo de la vida de la Amazonía y ahora me acusan de 'Capitán Nero', colocando fuego allá irresponsablemente. Están haciendo campaña contra Brasil", subrayó.
Las declaraciones de Bolsonaro se dan un día después de que el Mandatario insinuó que las ONGs podrían estar detrás del desastre ambiental, después de la decisión del Gobierno de reducir el presupuesto destinado a ellas y de las fricciones con Noruega y Alemania, que financian el llamado Fondo Amazonía.
Para el líder derechista, sus declaraciones del miércoles sobre las ONGs fueron tergiversadas por la prensa de una forma "inverosímil".
Bolsonaro advirtió que si "el mundo comienza a imponer barreras comerciales" por razones ambientales, la industria agropecuaria caminará "para atrás" y eso "afectará la vida de todos".
La polémica surge en momentos en que densas nubes de humo provenientes de la Amazonía se extienden sobre importantes ciudades del mayor pulmón vegetal del planeta y hasta llegan a enormes centros urbanos, como la ciudad de
Sao Paulo, a miles de kilómetros.
Según el estatal Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE), que contabiliza los incendios mediante imágenes de satélite, los focos de fuego en todo el país en lo que va de este año superan en un 83% a los del mismo período de 2018.
En un informe difundido este martes, el INPE precisó que entre el 1 de enero y el 18 de agosto ha registrado 71.497 focos de incendio en el país y que un 52,5 % se sitúan en la región amazónica.
El Ministerio del Medio Ambiente ha atribuido esa situación a una vasta sequía en las regiones norte y centro oeste del país, pero las organizaciones defensoras de la Amazonía tienen otra opinión.
Muchos grupos ecologistas sostienen que las llamas son producto de la acción del hombre y, en particular, de hacendados alentados por la intención de Bolsonaro de avanzar en la explotación de la región amazónica en los flancos de la minería y la agropecuaria.
En una entrevista publicada este jueves por el portal UOL, el ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, declaró que el Gobierno pretende conformar un equipo, integrado por varios organismos, para realizar acciones de desarrollo económico en la región y mejorar el sistema de recolección de datos y fiscalización.