El Presidente boliviano, Evo Morales, sobrevoló las zonas afectadas por el incendio en la Chiquitania, en el departamento de Santa Cruz, y colaboró con las tareas de extinción del fuego junto a bomberos y voluntarios.
Los ministros de Presidencia, Juan Ramón Quintana, y Defensa, Javier Zavaleta, también participaron en el control de los incendios, después de la reunión mantenida con el gabinete de emergencia ambiental en Roboré este martes.
"En un helicóptero Superpuma aterrizamos, ustedes han podido ver, y
en este momento apagamos cuatro puntos de foco de incendio, pequeños, pero siento que por el calor sigue repitiéndose, pero nos damos cuenta que es posible apagar trabajando conjuntamente", dijo a los periodistas.
Morales lamentó que los cambios en la dirección e intensidad del viento reaviven las llamas en algunas zonas, aunque aseguró que el material para extinguir el fuego continuará facilitándose a los voluntarios.
"Se ha dotado cerca de 800 equipos para aplacar y apagar el incendio, hoy llegaron 100 equipos más y vamos a seguir dotando más, no sólo al personal y a la gente voluntaria, sino también soldados y policías", precisó Morales.
El Mandatario también dijo que ha considerado la posibilidad de que, una vez que concluyan los trabajos de extinción, se capacite a los habitantes de la región sobre prevención y combate del fuego, por futuras emergencias. "Hemos recorrido (esta zona) y saludo el trabajo de todos y todas y esperamos seguir apoyando para acabar con el incendio", agregó.
Los incendios que tienen lugar en la Chiquitania desde el 9 de agosto, ya han arrasado alrededor de un millón de hectáreas en Bolivia, según relata el informe del Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz.
Actualmente, los países con territorio en la selva amazónica se encuentran en temporada de incendios, que tiene lugar entre agosto y octubre, siendo septiembre el punto más álgido. Además, los fuegos coinciden con una época en la que no ha habido lluvias desde hace más de seis meses.