El barco de rescate humanitario "Ocean Viking", que llevaba días solicitando puerto seguro para desembarcar a los 82 migrantes que lleve a bordo, recibió el permiso de las autoridades italianas para atracar en la isla de Lampedusa, en el sur del país.
Así lo anunció la ONG SOS Mediterráneo, que opera este barco humanitario junto a Médicos Sin Fronteras.
La luz verde de Italia se produce tras la investidura del nuevo gobierno de Giuseppe Conte del que no forma parte Matteo Salvini, el ministro del Interior saliente que se había opuesto categóricamente al atraque en las costas italianas de embarcaciones con migrantes a bordo.
Según el ministerio del Interior de Francia, los migrantes serán repartidos entre los cinco países europeos -Italia, Francia, Alemania, Portugal y Luxemburgo- que alcanzaron el acuerdo que permitió el visto bueno de Italia
"Ahora nos tenemos que poner de acuerdo sobre un verdadero mecanismo temporal europeo", escribió en Twitter el secretario de Estado francés, Christophe Castaner.
Cincuenta de los pasajeros del buque fueron rescatados el 8 de septiembre cuando viajaban a bordo de una precaria lancha neumática de contrabandistas de personas que partió desde Libia.
En tanto, los otros 34 migrantes fueron rescatados un día después en el Mediterráneo. Una mujer que estaba a punto de dar a luz y su esposo fueron evacuados a Malta a principios de semana.
En la primera expedición, a fines de agosto, el "Ocean Viking" recogió a 356 migrantes, que pudieron desembarcar en Malta. SOS Mediterráneo, en tanto, operaba antes el "Aquarius", fletado entre 2016 y diciembre de 2018, año en que fue privado de bandera.
