El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez.
AFP
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, consideró "injustificada" la expulsión este jueves de dos diplomáticos cubanos ante la ONU en Nueva York y calificó como "vulgar calumnia" el motivo esgrimido por EE.UU., que los acusa de involucrarse en actividades contra la seguridad del país.
"Rechazo categóricamente injustificada expulsión de dos funcionarios de la Misión Permanente de Cuba en ONU y endurecimiento de restricción de movimiento a los diplomáticos y familias", publicó el ministro de Exteriores cubano en Twitter.
Esta primera reacción desde La Habana llega apenas dos horas después de que el Departamento de Estado de EE.UU. anunciara que ha pedido a dos miembros de la misión cubana ante Naciones Unidas que dejen el país por haberse "involucrado en actividades dañinas para la seguridad nacional estadounidense".
Para Bruno Rodríguez es una "vulgar calumnia la imputación de que realizaron actos incompatibles con status diplomático".
La Administración de Donald Trump también anunció hoy que ha restringido los movimientos del resto de la misión cubana ante la ONU y a partir de ahora sus integrantes solo podrán moverse por Manhattan, el centro de negocios y administrativo de Nueva York donde se ubica el edificio que sirve de sede a Naciones Unidas.
En una segunda publicación, el canciller cubano juzga que tanto la expulsión de sus dos diplomáticos y la restricción de movimientos al resto tienen como objetivo "provocar una escalada diplomática que lleve al cierre de embajadas bilaterales, endurecer aún más el bloqueo (en referencia al embargo de EE.UU. a Cuba) y crear tensiones entre ambos países".
El Departamento de Estado estadounidense no ha mencionado por el momento los nombres de los diplomáticos afectados o su rango, y tampoco ha revelado detalles sobre las actividades "dañinas" en las que supuestamente han participado.
La misión de Cuba ante la ONU está formada por 16 personas, según los últimos datos que aparecen en su web.
Cuba suele usar la plataforma de la ONU para pedir el fin del embargo comercial y económico que le impone Washington. Desde 1992, cada año, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprueba un texto que no tiene carácter vinculante, pero en el que se insta al Ejecutivo estadounidense a acabar con el "bloqueo" y se resaltan sus efectos negativos.