Violencia en las calles de París durante las manifestaciones de hoy.
AFP
El ambiente era tenso esta mañana en la capital francesa, donde se llevaron a cabo varias marchas simultáneamente. Además de la manifestación por el clima, también tuvo lugar una protesta de los "chalecos amarillos" -que critican la política social y fiscal del Gobierno- y otra contra un proyecto de reforma de las jubilaciones.
En la manifestación por el cambio climático, una serie de incidentes estallaron en el centro de París, cuando cientos de activistas de grupos violentos, los
"Black Blocs" se infiltraron. Esto llevó a las ONG’s organizadoras a pedir a los manifestantes que abandonaran la marcha.
"No asuman ningún riesgo y abandonen la marcha por el clima. No se están dando las condiciones de una manifestación no violenta", tuiteó Greenpeace, denunciando el uso de gases "lacrimógenos contra manifestantes no violentos y familias".
En tanto, las concentraciones de los "chalecos amarillos" no habían sido autorizadas, pero sus integrantes, que este sábado cumplían su jornada número 45 de movilizaciones, mantuvieron su protesta y acabaron siendo dispersados con gases lacrimógenos por parte de las fuerzas del orden.
163 detenidos hasta el momento
El colectivo indicó en su cuenta en las redes sociales
"Le nombre jaune" (El número amarillo), creada para ofrecer sus propias cifras, que la participación se elevó a un mínimo de más de
90 mil personas.
Ambos conflictos llevaron a un ambiente de violencia, en el cual el bulevar Saint-Michel, en el barrio latino, militantes de extrema izquierda -algunos con la cara tapada- lanzaron objetos contra las fuerzas de seguridad y vandalizaron una sucursal bancaria.
Hasta la tarde de la ciudad francesa habían sido detenidas 163 personas y 174, multadas, en las zonas en las que estaba prohibido manifestarse, según la policía.