El partido de Benny Gantz, gran rival de Benjamin Netanyahu en las elecciones legislativas del 17 de septiembre en Israel, anuló este martes las negociaciones previstas al día siguiente sobre la formación de un gobierno de unión.
Los negociadores del Likud (derecha) de Netanyahu y del partido centrista Kahol Lavan ("Azul-Blanco") de Gantz tenían que reunirse el miércoles durante el día. Y estaba previsto que por la noche se entrevistaran los dos rivales, que se disputan la dirección de un posible gobierno de unión.
Pero tras una reunión este martes por la noche, al término de dos días feriados con motivo del Año Nuevo judío, Rosh Hashana, el grupo de Gantz anunció la anulación del encuentro.
"Llegados a este punto, l
as precondiciones esenciales requeridas para nuevas conversaciones entre los equipos de negociación no se cumplen. Por consiguiente, no tendrá lugar ningún encuentro el miércoles", indicó en un comunicado la formación "Azul-Blanco", sin no obstante no cerrar la puerta a otras negociaciones.
"Cuando esto sea apropiado y necesario, se añadirá un encuentro en la agenda esta semana o la próxima", agregó el partido.
La formación no dio detalles sobre estas "precondiciones", pero estima que Netanyahu no puede dirigir un gobierno mientras sus temas judiciales no estén solucionados. Considera asimismo que, en estas negociaciones, Netanyahu no puede representar a todos los partidos de derecha y religiosos, solo al Likud.
El miércoles, los abogados del Primer Ministro comparecerán ante el fiscal general de Israel, quien tiene que decidir si inculpa o no a Benjamin Netanyahu por "fraude", "corrupción" y "abuso de confianza" en una serie de casos.
"El Likud está estupefacto por la decisión de Kahol Lavan de hacer pedazos las negociaciones y anular los encuentros previstos mañana entre el primer ministro Netanyahu y Gantz, así como el encuentro preliminar entre los equipos de negociadores", reaccionó un portavoz del Likud.