El canciller de Bolivia, Diego Pary, denunció este lunes un golpe de Estado en curso en su país, al comparecer ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) por la crisis desatada tras la cuestionada reelección del Presidente Evo Morales.
"Hay un golpe de Estado en camino que pretende quebrantar la vida democrática de Bolivia llevándonos al caos y al enfrentamiento", afirmó Pary, durante una sesión extraordinaria del consejo permanente de la OEA en Washington.
Pary citó como evidencia "la agresión selectiva de la ciudadanía y a las fuerzas de seguridad", así como "el llamamiento a levantarse a las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional" y "la conminatoria bajo amenaza al presidente Morales de dejar el gobierno en 48 horas", lanzada el sábado desde el bastión opositor Santa Cruz.
En su segunda comparecencia ante el órgano ejecutivo de la OEA tras los controvertidos comicios del 20 de octubre, Pary llamó a los representantes de los 34 países miembros activos del bloque regional a sumarse a "la defensa de la democracia" en Bolivia.
Según Pary, los "avances" en términos de "inclusión política" y "crecimiento económico sin precedentes" del gobierno izquierdista de Morales, un líder indígena en el poder desde 2006, corren "riesgo de un retroceso" a instancias de "grupos fascistas".
Pary hizo estas declaraciones tras reunirse con el embajador de Estados Unidos ante la OEA, Carlos Trujillo, quien durante la sesión cuestionó que la autoridad electoral boliviana ya haya declarado ganador a Morales, e instó "firmemente" a la realización de un balotaje entre Morales y el opositor Carlos Mesa.
"Hay una única manera de (...) asegurar un ganador legítimo y es tener una segunda ronda de elecciones libres y transparentes, como lo recomendó la misión de observación electoral de la OEA", dijo Trujillo.
Pary no ahondó sobre la conversación con el representante estadounidense, pero reiteró el compromiso del gobierno de cumplir con lo que indique la auditoría electoral solicitada a la OEA luego de que la oposición denunciara un "fraude".
Durante la sesión, Brasil, Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, Guatemala, Perú, República Dominicana y Venezuela (representada por el delegado del líder opositor Juan Guaidó) instaron en una declaración a "todas las partes" en Bolivia a asumir el resultado del análisis de integridad electoral "con carácter vinculante", e implementar sus conclusiones.
En diálogo con los periodistas, Pary negó que la auditoría que comenzó a realizar la OEA el jueves difiera con otra paralela que, según él mismo informó el domingo, fue solicitada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) boliviano al Consejo de Expertos Electorales de Latinoamérica (Ceela).
"Son auditorías complementarias", dijo el canciller. "Estamos seguros de que no va a haber ninguna diferencia porque el proceso electoral ha sido absolutamente transparente".