El Senado de Argentina aprobó este miércoles por mayoría rechazar los ataques registrados en los últimos días a la residencia del embajador en Chile, José Octavio Bordón, y a la sede diplomática en el marco de las violentas protestas que se producen en el país.
La declaración, impulsada por el oficialismo, expresa un "enérgico rechazo a los ataques" sufridos en la residencia del embajador argentino "por parte de sectores violentos y antidemocráticos", por los que Bordón tuvo que ser evacuado ayer por la noche.
También manifestó una "profunda preocupación por los actos vandálicos" acontecidos en la embajada argentina en Santiago de Chile el pasado viernes.
Asimismo, la Cámara Alta argentina condenó "todo acto de violencia y vandalismo como forma de expresión pública y de promoción de ideas políticas".
A su vez, hizo "un llamado a todos los actores políticos y sociales chilenos para preservar la paz social y el diálogo".
Según informó la agencia estatal argentina Télam, un grupo de manifestantes atacó la residencia de Bordón, ubicada a pocos metros de la céntrica Plaza Italia, que es centro de las masivas concentraciones que vive Chile desde octubre.
"Antes de que atacaran nuestra residencia arruinaron una iglesia, quemaron una universidad, quemaron un hotel y quemaron diplomacias", expresó hoy el embajador al canal Todo Noticias.
Esa zona acogió este martes el cierre de la huelga general convocada en el país contra el presidente Sebastián Piñera.
En cuanto a la embajada de Argentina en su país vecino, Bordón explicó que "como todos los edificios del centro, está totalmente pintada, pero nunca hubo una agresión contra la misma".
Los episodios de violencia y vandalismo han acompañado las protestas desde su inicio, el pasado 18 de octubre, y en su marco han fallecido al menos 20 personas, mientras que miles han sido heridos.
El estallido social sin precedentes busca que se hagan reformas profundas en los modelos de pensiones, sanidad y educación, entre otros.