Geng Shuang, vocero de la Cancillería china.
El Gobierno chino lamentó este lunes que la conferencia del clima COP25 terminara "sin que los países participantes pudieran llegar a consensos sustanciales" para combatir la emergencia climática.
"Pensamos que hay una brecha entre los resultados alcanzados y la expectación que tenía la comunidad internacional sobre este encuentro. Con todo, sienta las bases para llegar a pactos en el futuro", estimó hoy en rueda de prensa el vocero del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Geng Shuang.
El encuentro, según el portavoz,
evidenció las "notorias diferencias" entre los países en desarrollo y los países desarrollados sobre cómo repartir responsabilidades a la hora de abordar el cambio climático.
"No hay el suficiente apoyo de los países desarrollados. Tienen que ponerse al frente y compartir con los países en desarrollo sus valiosas políticas, así como otorgar más fondos para cerrar la brecha y poder alcanzar los objetivos del Acuerdo de París en 2020", afirmó Geng.
"China será responsable y cumplirá con sus compromisos", añadió.
La cumbre del clima consiguió cerrar el domingo un documento para aumentar la ambición climática en 2020 y cumplir el Acuerdo de París que compromete a los países a evitar que la temperatura media del planeta suba este siglo por encima de 1,5 grados.
El acuerdo, titulado "Chile-Madrid, tiempo de actuar", se logró casi dos días después de la jornada prevista para la clausura de la Conferencia y fue aprobado por la presidenta de la COP25, la chilena Carolina Schmidt, tras un tenso debate con Brasil que no aceptaba inicialmente dos párrafos incluidos en el acuerdo sobre océanos y uso de tierras.
El acuerdo final de la COP25 establece que los países deberán presentar en 2020 unos compromisos más ambiciosos de reducción de emisiones (las llamadas Contribuciones Nacionales Determinadas) para hacer frente a la emergencia climática.
Asimismo, la Alianza por la Acción Climática que lanzó el secretario general de la ONU,
António Guterres, en la cumbre de Nueva York en septiembre, creció en Madrid y suma ya 73 países comprometidos a aumentar su ambición climática en 2020 y a alcanzar la neutralidad en carbono en 2050.
Sin embargo, a esa alianza no se sumó ninguno de los países más contaminantes del planeta (ni Estados Unidos, ni China, ni Rusia), ni ha superado la cifra de 100 países que Chile se había propuesto alcanzar en Madrid, aunque sí se han adherido 400 ciudades de todo el mundo y casi 800 grandes empresas.