Este martes, el ex Presidente de Pakistán entre 2001 y 2008, Pervez Musharraf (76), fue sentenciado a muerte por el delito de traición. Entre los hitos que marcaron su historia y lo llevaron –de una forma u otra- a ser sentenciado a muerte está haber suspendido el orden constitucional en 2007, establecer estado de emergencia y no proteger a la Primera Ministra Benazir Bhutto, asesinada ese mismo año.
Musharraf nació en 1943 en Delhi, India. Varios años después, fue nombrado comandante del Ejército paquistaní mientras se desarrollaba la guerra entre India y Pakistán. Tras una gran carrera de ascenso dentro del Ejército de ese país, en 1999 fue nombrado presidente de los jefes del personal conjunto, detalló CNN Mundo.
Cinco meses después, lideró un golpe de Estado contra el Primer Ministro Nawas Sharif y se convirtió en el jefe de Gobierno. Esto es posterior a que Nawas hubiera despedido a Musharraf después de una fallida invasión del Ejército en Kargil, Cachemira, que era controlada por los indios.
Después de su toma de poder, el dictador sobrevivió a un sinnúmero de intentos de asesinato y presenció en primera línea la guerra entre los islamitas militantes y occidente.
Vínculo con EE.UU.
En 2001 es nombrado Presidente de Pakistán sin dejar de ser el jefe del Ejército y decide apoyar la "guerra contra el terror" del Mandatario estadounidense George W. Bush, después de los ataques del 11 de septiembre. Esto, según informó la BBC, provocó que terminara chocando con militares que simpatizaban con los talibanes y Al Qaeda.
En 2002 es sometido a referéndum sobre si ocuparía el cargo los próximos cinco años, votación que ganó por un amplio margen. Ese mismo año estableció 29 enmiendas a la Constitución y se otorgó el poder de disolver el Parlamento y de destituir al primer ministro.
El Presidente paquistaní reiteradas veces tuvo que buscar un equilibrio entre la presión que le ejercía Estados Unidos para tomar fuertes medidas contra el extremismo en Pakistán y las peticiones de los grupos islamitas cada vez más antiamericanos.
Debido a esto, el Mandatario fue acusado varias veces por la OTAN y el Gobierno de Afganistán de no hacer algo para detener los movimientos de militantes simpatizantes de Al Qaeda y los talibanes desde Pakistán hacia Afganistán.
En 2011 resurgieron preguntas acerca del historial de Musharraf cuando se descubrió que Osama Bin Laden –líder de Al Qaeda- había estado viviendo durante años en Pakistán, cerca de una academia militar, situación que el Mandatario negó saber.
Su caída
En 2004 un voto de confianza del Parlamento le permitió a Musharraf permanecer en el poder hasta 2007, esto lo obtiene al prometer renunciar como Jefe del Ejército a fines de 2004.
Tres años después, un recuento no oficial indicó que Musharraf ganó las elecciones presidenciales. Y, un mes después, el Presidente declaró estado de emergencia en Pakistán, suspendió la Constitución del país, pospuso las elecciones de enero de 2008 , despidió al presidente del Poder Judicial y censuró a los medios de comunicación.
Tras esto, las autoridades policiales detuvieron a 1.500 personas que protestaron por la declaración de estado de emergencia y los cambios hechos por el Presidente.
El ex Presidente de Estados Unidos George W. Bush y el ex Mandatario de Pakistán Pervez Musharraf en la Casa Presidencial en Islamabad, el 4 de marzo de 2006 (Crédito: AFP).
A fines de 2007, Sharif volvió de su exilio y esto marcó el comienzo del fin de la era Musharraf.
Ese año, el ex jefe del Ejército trató de extender su mandato, pero en febrero de 2008 su partido perdió las elecciones parlamentarias, lo que provocó que a los seis meses renunciara para evitar un juicio político y abandonó definitivamente el país.
Tras un largo tiempo viviendo en Londres y Dubai, según la BBC, el ex Presidente paquistaní ganó cientos de miles de dólares realizando conferencias por todo el mundo, pero siempre mantuvo su ambición de volver a su país.
En marzo de 2013, el ex Mandatario volvió a Pakistán para competir en las elecciones, pero terminó humillado y detenido.
Entre 2013 y 2014 Musharraf fue
acusado por la Corte paquistaní de asesinato por la muerte de la primera ministra del país,
Benazir Bhutto, y un tribunal especial lo acusó de alta traición, delito por lo que peligraba la cadena perpetua o la pena de muerte.
Después se vio envuelto en varios casos, incluido ser acusado de no dar la seguridad adecuada a Bhutto, cuyo asesinato por los talibanes en 2007 conmocionó a Pakistán y dio la vuelta al mundo. En una investigación de las Naciones Unidas sobre el asesinato, se denuncia al Gobierno de Musharraf de "fracaso deliberado" para proteger a la ex primera ministra.
Posteriormente, el ex jefe del Ejército es acusado de traición por suspender la Constitución en 2007, pero el juicio se extendió debido a la alta influencia de los militares que han gobernado intermitentemente en ese país, entonces se estableció un tribunal especial para juzgar el ex Mandatario, pero este se fue del país en 2016 para recibir tratamiento médico.
Pena de muerte
Después de que la justicia lo declaró prófugo en 2017, Musharraf prometió que volvería a su país "una vez que tenga el alta médica" para ser juzgado por el caso del asesinato de Bhutto.
En noviembre de 2019 el tribunal atrasó el juicio en su contra y, coincidentemente, el 3 de diciembre pasado el ex jefe del Ejército fue ingresado a un hospital por motivos de salud, explicando que por esto es que todavía no regresaba a Pakistán para enfrentar el juicio contra él por alta traición.
Pero este martes, tras años de juicio, Musharraf fue declarado culpable por alta traición por lo que fue sentenciado a pena de muerte debido a la suspensión del orden constitucional en Pakistán y declarar estado de emergencia 10 años atrás. Sin embargo, queda por ver lo que eso significará realmente.
