La Franja de Gaza contará a partir de este martes sólo con tres o cuatro horas de electricidad al día, debido al cierre de su única planta eléctrica ante una severa falta de combustible, causada por el bloqueo a la entrada de productos por parte de Israel, en respuesta al lanzamiento de globos incendiarios.
Muhamad Thabet, director de comunicaciones de la Corporación de Distribución de Electricidad de Gaza informó hoy a Efe del cierre de la única planta energética de la franja como consecuencia de la falta de gasolina.
Esto "afectará negativamente todos los aspectos de la vida en la Franja de Gaza", señaló hoy en un comunicado la Autoridad Palestina de Energía, que responsabiliza a Israel de las posibles consecuencias que esto pueda acarrear.
Según un portavoz del ministerio de Sanidad en Gaza, la falta de electricidad, sobre todo en los hospitales,
podría tener "serias repercusiones en la vida de bebés prematuros, pacientes en cuidados intensivos, otros con problemas renales, operaciones y partos por cesárea".
El pasado día 11, cerró el único paso fronterizo con Gaza para bienes y productos, Kerem Shalom, como medida punitiva por el lanzamiento de globos incendiarios contra su territorio y en el marco de un repunte de tensión en la zona.
Desde entonces, los lanzamientos no han cesado y han desencadenando decenas de incendios en las comunidades israelíes colindantes, acompañados en dos ocasiones por el disparo de cohetes, con las consiguientes nuevas medidas de represalia israelíes, entre ellas bombardeos nocturnos durante los últimos siete días contra objetivos militares del movimiento islamista Hamas (que desde 2007 controla de facto el enclave), y la prohibición de faenar en la costa.
Gaza permanece bajo bloqueo israelí desde la toma del poder de Hamas en 2007, momento en que quedó bajo control de Israel la entrada y salida de personas y bienes como la gasolina.
Una delegación egipcia llegó ayer, lunes, a Gaza y se reunió con miembros de Hamas para intentar calmar la situación y restaurar la calma acordada el año pasado, también con la mediación de Egipto, ayudado por Naciones Unidas.
