Estados Unidos acusó este viernes a Rusia de orquestar una operación para crear un pretexto con el fin de invadir o entrar en Ucrania, en el marco de una intensa semana de contactos diplomáticos entre la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) con Moscú, con el fin de resolver los conflictos en materia de seguridad.
En esa línea, tanto desde la Casa Blanca como el Pentágono, el Gobierno estadounidense afirmó que Rusia ha posicionado un grupo de operativos para llevar a cabo lo que en el argot militar de EE.UU. se denomina "una operación de bandera falsa" en el este de Ucrania, lugar donde las tropas rusas se encuentran desplegadas actualmente.
El portavoz del Departamento de Defensa, John Kirby, explicó que se trataría de una operación "diseñada para que parezca un ataque contra ellos (los rusos), o gente que habla ruso en Ucrania, como una excusa para entrar" en suelo ucraniano. En tanto, la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, aseguró, por su parte, que esos operativos rusos están entrenados en guerrilla urbana y en el uso de explosivos "para llevar a cabo actos de sabotaje contra las propias fuerzas rusas", que justifiquen esa intervención.
De acuerdo al Pentágono, dichos operativos sería una mezcla de individuos dentro del Gobierno ruso que pueden ser desde agentes de inteligencia y de seguridad, hasta incluso soldados, "a menudos son híbridos". En paralelo a esa presunta operación, Kirby apuntó que EE.UU. dispone de indicios de que "actores de influencia rusa" han comenzado difundir provocaciones falsas por parte de Ucrania, para inventar un pretexto para una incursión.
Según la Casa Blanca, Moscú pretende crear la "narrativa" de que hay un deterioro de los derechos humanos en Ucrania y poder así "justificar la intervención rusa". Estas acusaciones coinciden con las denuncias hechas este viernes por Ucrania sobre un ciberataque a 70 páginas webs, varias de ellas gubernamentales, como las del Gabinete de Ministros o el ministerio de Asuntos Exteriores, que Kiev considera que tienen la "huella rusa".
Al respecto, Psaki avisó de que EE.UU. tomará "las medidas necesarias" para "defender" al país europeo. Si bien no señaló directamente a Rusia como responsable del sabotaje informático. En ese sentido, Washington recordó que no es la primera vez que ve a Moscú actuar de esta forma -en referencia a la invasión de Crimea en 2014- y que ahora la pelota está en el tejado del presidente ruso, Vladímir Putin.
"Si deciden que van a invadir Ucrania, las consecuencias económicas van mucho más allá de 2014 -cuando Rusia invadió Crimea-. Si deciden que quieren entablar conversaciones diplomáticas, estamos muy abiertos".
Jen Psaki, portavoz de la Casa Banca
Pese a estas acusaciones, Washington no cree que Putin haya tomado ya la decisión de atacar Ucrania y expresó su preferencia de que "la diplomacia prevalezca": "La Administración no está dispuesta a abandonar los esfuerzos para resolver esto diplomáticamente", aseguró Kirby. A su vez, Psaki hizo hincapié en que el Presidente ruso debe determinar "cuál es el camino a seguir".
"Si deciden que van a invadir Ucrania, las consecuencias económicas van mucho más allá de 2014 -cuando Rusia invadió Crimea-. Si deciden que quieren entablar conversaciones diplomáticas, estamos muy abiertos", dijo la portavoz. Por ello, Estados Unidos ofrece asistencia militar a Kiev y actualmente hay en Ucrania unos 200 efectivos de la Guardia Nacional de Florida, que están en una misión de entrenamiento.
"Se encuentran en una misión rotatoria de asistencia y asesoría. Es algo que hemos estado haciendo durante varios años", precisó Kirby, quien no quiso aclarar el futuro de esos efectivos en caso de una eventual incursión rusa.
Semana de negociaciones
EE.UU. lanzó estas acusaciones contra Moscú tras una intensa semana de reuniones en Ginebra, Bruselas y Viena, en la que representantes rusos han mantenido encuentros con responsables estadounidenses, así como de la OTAN y de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), que han arrojado escasos resultados.
Ante este panorama, el Presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, propuso a Biden celebrar una reunión trilateral con Putin para rebajar la tensión en la región, anunció hoy Andriy Yermak, jefe de la oficina presidencial ucraniana.
Putin ha acusado a Zelenski de entregar la dirección de Ucrania en manos extranjeras, en concreto de EE.UU., Alemania y Francia. La tensión fronteriza entre ambos países y la aspiración de Ucrania a ingresar en la OTAN centró las consultas mantenidas esta semana entre Rusia, Estados Unidos y la Alianza Atlántica.
Moscú reconoció que la postura estadounidense sobre la expansión de la OTAN hacia el este sigue siendo "impenetrable" y aseguró que no esperará "eternamente" a recibir una respuesta sobre las garantías de seguridad.