El chileno Nicolás Zepeda, acusado por el asesinato de su ex novia japonesa Narumi Kurosaki en 2016, volvió a negar este martes ante un tribunal francés los cargos que se le imputan y los testimonios en su contra.
"Yo no soy esa persona", declaró firmemente el acusado, de 31 años, ante el juez, después de que dos testigos hubieran asegurado la víspera haber visto a Zepeda "escondido" y "con actitud sospechosa" en la residencia universitaria en la que vivía Kurosaki en días previos a su desaparición. Una de los testigos incluso afirmó haber hablado con él y lo identificó ante la policía.
El acusado -que podría ser condenado a perpetuidad- también negó ser el individuo, captado por las cámaras de seguridad de la residencia, merodeando y haciendo fotos por la parte trasera del edificio en días previos a los hechos.
Un hombre que "se parece extrañamente" al acusado, insistió este martes Sylvie Galley, abogada de la parte civil.
"Entré por primera vez (a la residencia) con Narumi", sostuvo Zepeda ante el tribunal, en la sexta audiencia de este mediático juicio, iniciado hace una semana.
Narumi Kurosaki, de 21 años en aquel entonces, desapareció el 4 de diciembre de 2016 y su cuerpo nunca fue encontrado.
Ese día, el procesado se reencontró con ella en Besançon y se fueron juntos a cenar a un pueblo cercano.
Tras ello, regresaron a la residencia, donde pasaron juntos cerca de 30 horas, hasta que el chileno se fue, dejándola en perfecto estado de salud, en la madrugada del 6 de diciembre del mismo año, según la versión del acusado.
Durante la audiencia del lunes, varios testigos narraron los "espantosos gritos de mujer" que escucharon en la residencia universitaria la noche del 4 de diciembre, sobre las tres de la madrugada.
Consultado al respecto, Zepeda contestó, sereno:
"yo no escuché absolutamente nada, estaba durmiendo".
"A mí también me parece extraño", apuntó. "Hay que seguir investigando qué hay detrás de eso", señaló, observando que los testigos simplemente "narraron lo que vivieron".
En general, el chileno suele mostrarse tranquilo y contestar con voz firme y clara. Pero este martes, al recordar su reencuentro con la joven nipona, no pudo contener las lágrimas.
"Comenzamos a hablar de lo que había pasado hace unos meses, le pregunté sobre su familia, ella sobre la mía, (sobre) qué estaba haciendo en Chile, me preguntó por mi perrito...", contó Zepeda, entre sollozos.
El juicio se prolongará hasta el 12 de abril, según el programa oficial.