El ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, inició este jueves una gira por islas del sur del Pacífico, zona en la que busca expandir su influencia a través de un pacto con el foco en seguridad, lo que despierta inquietud en la vecina Australia y algunos de los involucrados.
Según un documento al que han tenido acceso varios medios, China propondrá a una decena de naciones del sur de Pacífico un plan de acción a cinco años para, entre muchos otros temas, cooperar en "asuntos de seguridad tradicional y no tradicional".
Este es el trasfondo con el que Wang realizó este jueves su primera parada en las
Islas Salomón, el arranque de una gira de diez días que lo llevará también a
Kiribati, Samoa, Fiyi, Tonga, Vanuatu, Papúa Nueva Guinea y Timor Oriental.
Las Islas Salomón son precisamente el único país de la zona con el que China ya tiene firmado un polémico acuerdo de seguridad, que se hizo público hace poco más de un mes y que abre la puerta al envío de fuerzas de seguridad chinas al país insular.
Wang aseguró durante la visita que China "apoya firmemente a las Islas Salomón en salvaguardar su soberanía nacional, seguridad e integridad territorial", según un comunicado de la Cancillería china publicado este jueves, que no hizo mención al pacto.
"La parte china se compromete a trabajar con las islas Salomón para poner en marcha el consenso alcanzado entre los líderes de ambos países", subraya el comunicado.
Temor a bases militares de China
Se espera que la visita de Wang a las Salomón, donde Australia y su socio, Estados Unidos, temen que Beijing establezca una base militar en virtud del pacto, transcurra con el mismo nivel de secretismo que fue negociado este acuerdo y los que en principio están en el tintero.
En esta línea, se ha bloqueado el acceso a los eventos de la visita a periodistas acreditados para medios internacionales, mientras aquellos a quienes sí se permite la entrada apenas tienen margen para hacer preguntas, según el diario The Guardian.
Una tónica que en principio se mantendrá durante el resto de la gira de diez días de Wang, quien viaja acompañado de una delegación de alto nivel, especialmente después de las últimas filtraciones sobre los presuntos planes del canciller en la zona.
Mientras una exclusiva del Financial Times anticipaba el fin de semana que China firmaría acuerdos de seguridad similares al de las Salomón con
Kiribati y otros países, poco antes del viaje medios anglosajones, incluida la agencia australiana AAP, revelaban
el ambicioso acuerdo multisectorial que Beijing busca firmar con estos países, con especial foco en seguridad.
Según el citado documento al que tuvieron acceso dichos medios, China buscaría entrenar a la policía local, así como más acceso a los recursos naturales y marítimos de la zona, abriendo la puerta a la posibilidad de establecer una zona de libre comercio con estas naciones.
Un supuesto plan que ha tensado las cuerdas aún más con Australia, tradicional aliado en seguridad de estos países, cuyo recién estrenado Primer Ministro, Anthony Albanese, afirmó este jueves que "responderá" a los movimientos de China para aumentar su influencia en el Pacífico.
Su ministra de Exteriores, Penny Wong, se encuentra hoy en Fiyi, desde donde urgió a las islas del sur del Pacífico a "considerar dónde quisieran estar en tres o diez años", a la hora de decidir si se suman o no al pacto con China.
Nueva Guerra Fría
Con más vehemencia se expresó el Presidente de los Estados Federados de Micronesia, David Panuelo, quien en una carta a los 21 líderes de la región insular les advirtió que los planes de China amenazan la estabilidad en la zona y podrían ser el detonante de una "nueva guerra fría" entre Beijing y Occidente.
Micronesia será uno de los participantes de uno de los puntos centrales de la gira de Wang, una reunión virtual el lunes entre el canciller chino y los ministros de exteriores de dicho país, Fiyi, las Salomón, Papúa Nueva Guinea, Samoa, Tonga, Kiribati, Vanuatu, las islas Cook y Niue, en la que se espera que se discuta el acuerdo.
Panuelo urgió a sus vecinos a meditar sobre lo que puede suponer
el "mayor cambio de juego en el Pacífico de nuestras vidas" y previno que la expansión china “aumenta las posibilidades de que China entre en conflicto con Australia, Japón, Estados Unidos y Nueva Zelanda”.
Ante los últimos movimientos de China en la zona, el pasado martes Estados Unidos y sus socios del Quad (EE.UU., Japón, Australia y la India) se comprometieron a estrechar su cooperación con los países insulares del Pacífico y anunciaron un paquete de ayuda de 50.000 millones de dólares en proyectos de infraestructura.