La justicia de Argentina renovó la solicitud a Interpol (Policía internacional) para que se mantengan vigentes las alertas rojas con el objetivo de lograr la detención de cinco iraníes acusados por el atentado de 1994 contra la sede de la mutualista judía AMIA, de Buenos Aires.
El requerimiento fue cursado por el juez federal Daniel Rafecas, quien pidió a Interpol mantener las alertas rojas de captura internacional por cinco años más, hasta noviembre de 2027.
Tanto la comunidad judía en Argentina como la justicia responsabilizan del ataque a la AMIA, el mayor atentado cometido en suelo argentino, a miembros del Gobierno iraní de ese entonces y del partido libanés Hezbollah.
La solicitud de Argentina a Interpol de publicación de las circulares rojas debe renovarse cada cinco años y tiene como objetivo lograr la detención internacional de los iraníes Moshen Rezai, Ahmad Vahidi, Alí Fallahijan, Ahmad Reza Asghari y Moshen Rabbani.
Todos ellos, sobre los que pesan ordenes de captura internacional con fines de extradición a Argentina desde 2007, han sido imputados por la justicia del país trasandino como presuntos responsables del ataque terrorista a la AMIA, en el que murieron 85 personas y que permanece impune.
Ahmad Vahidi, actual ministro del Interior de Irán, era al momento del atentado el jefe de las Fuerzas Quds, el brazo paramilitar del cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán.
Por su parte, Mohsen Rezai fue el jefe de la Guardia Revolucionaria iraní durante 16 años, período en el que se perpetró el ataque contra la AMIA.
En tanto, Fallahijan fue ministro de Inteligencia y Seguridad de Irán entre 1989 y 1997; Asghari se desempeñó como tercer secretario de la embajada de Irán en Buenos Aires; y Rabbani ocupó el cargo de consejero cultural en la misma delegación diplomática.