Estos últimos días ha vuelto a surgir en Perú un debate que se ha instalado por años en el país pero que, esta vez, podría tener un resultado distinto. Se trata de la vuelta al bicameralismo después de casi 30 años, una iniciativa propuesta por el fujimorismo que suma gran adhesión al interior del Congreso, aunque se sabe que a nivel ciudadano no goza de tanta popularidad.
Este martes, la Comisión de Constitución del Legislativo peruano tiene contemplado retomar la discusión iniciada el pasado miércoles por su presidenta, la congresista Patricia Juárez, del partido fujimorista Fuerza Popular (FP). De acuerdo con los medios locales, la instancia podría dar hoy su beneplácito a la iniciativa, que luego pasaría a ser votada por el pleno.
La propuesta de Juárez contempla
la instauración de una Cámara de Diputados que contará con 130 escaños, además de un Senado integrado por 45 representantes. Este nuevo Poder Legislativo comenzaría a operar para el periodo 2026-2031, según explica el diario La República.
Los requisitos para ser diputado serán los mismos que se piden hoy para los postulantes al Congreso -ser peruano de nacimiento; haber cumplido 25 años; gozar del derecho de sufragio y estar inscrito en el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil-, mientras que quienes deseen integrar el Senado, deberán haber cumplido 35 años y tener una experiencia de al menos cinco años en el sector público o privado, además de los otros requerimientos para la Cámara Baja.
La iniciativa también propone, a diferencia de la normativa actual, que los parlamentarios puedan ser reelectos por un periodo adicional, algo que hoy no está permitido.
Según recoge El Comercio, Juárez defiende que
la bicameralidad servirá para evitar decisiones apresuradas, tener "mejores leyes para el país" y contar con "mayores espacios de reflexión y votación". "Hoy nuestro país necesita diálogo, experiencia, sentido común y sobre todo sosiego desde el Parlamento", explicó.
"Planteamos que la propuesta de ley que aprueba la Cámara de Diputados pase a un proceso de revisión a cargo del Senado. Esta disposición es la piedra angular del sistema bicameral, pues el Senado representa la cámara revisora por excelencia, siendo además la última en pronunciarse como colegiado dentro del proceso legislativo", añadió.
Una historia de idas y vueltas
El bicameralismo no es algo extraño en la historia de Perú. Este sistema fue instaurado por primera vez por la Constitución de 1920, con una Cámara de Diputados compuesta por 110 representantes y un Senado con 35 escaños.
La Carta Magna de 1979, en tanto, aumentó el número de parlamentarios a 180 diputados y 60 senadores.
El escenario cambió con la
Constitución de 1993, cuya redacción fue convocada por el entonces Presidente
Alberto Fujimori después del autogolpe de Estado el año anterior que culminó con la disolución del Congreso y la intervención de los poderes del Estado.
La nueva Carta Magna, en cuya elaboración no participaron algunos partidos opositores, estableció el retorno a un sistema parlamentario unicameral.
En estos casi 30 años han sido varias las iniciativas para revertir la situación, con resultados negativos. Sin ir más lejos, en el plebiscito de reformas constitucionales de 2018, el 90,7% de la ciudadanía votó en contra de volver a la bicameralidad, mientras que el 85,5% se manifestó a favor de mantener la prohibición de reelección inmediata de los congresistas.
Un año después, la Comisión de Alto Nivel para la Reforma Política, encabezada por el politólogo Fernando Tuesta, propuso volver a un sistema parlamentario de dos cámaras. Asimismo, en el periodo legislativo anterior (2020-2021), la Comisión de Constitución aprobó el retorno al bicameralismo, pero la propuesta finalmente no se discutió en el pleno.
Apoyos y críticas
Para aprobar esta reforma constitucional en el Legislativo se necesitan 87 votos entre los 130 congresistas. De acuerdo con El Comercio, de momento hay seis bancadas que apoyan este cambio: además del partido fujimorista Fuerza Popular, ya se han manifestado a favor los miembros de Renovación Popular (RP, derecha), Alianza para el Progreso (APP, centroderecha), Somos Perú (SP, centroderecha), Perú Democrático (PD, izquierda) y Avanza País (derecha).
Estas seis bancadas suman 69 congresistas, por lo que es necesario seguir sumando apoyos. En el oficialista Perú Libre, que cuenta con 17 escaños, la posición es aún indefinida y han remarcado en la necesidad de un debate mayor. Tampoco han definido su postura las bancadas de Acción Popular (15 representantes), y el izquierdistas Bloque Magisterial (10 escaños) . En tanto, en el también izquierdista Cambio Democrático (5 escaños) se han manifestado en contra de la iniciativa en las actuales condiciones.
81votos se necesitan para aprobar la iniciativa en el pleno
También habría que ver las posturas de
Podemos Perú (4 congresistas) y el
Partido Morado (3), que no forman parte de ninguna bancada al no contar con el mínimo de 5 miembros, además de
7 congresistas independientes.
La iniciativa, no obstante, también ha recibido críticas. Según formula el diario La República, la reforma buscaría darle más atribuciones al Poder Legislativo que actualmente no están contempladas en la Carta Magna, como la posibilidad de acusar constitucionalmente a los directores de los organismos del sistema electoral y la designación del contralor general. Asimismo, la reelección inmediata de los parlamentarios es un punto que no suma muchos apoyos.
A esto se suma un posible rechazo popular considerando el expresivo resultado del referéndum de 2018. "Hay una falta de lectura política. La ciudadanía le dijo no a la bicameralidad en el 2018. En todo caso, tendrían que ratificar esta reforma con un referéndum: consultar al pueblo, que es la génesis del poder constituyente", indicó a La República el abogado constitucionalista Luciano López.
La discusión ya comenzó. Habrá que ver si, finalmente, la política peruana da nuevamente un cambio radical.