El Presidente de Rusia, Vladimir Putin, impuso este miércoles la ley marcial en los cuatro territorios recientemente anexionados por Moscú y comenzó la evacuación de la sureña Jersón, medidas extraordinarias que coinciden con una ofensiva de la tropas ucranianas.
El decreto de ley marcial, que afecta, además de la región de Jersón, a la de Zaporiyia y las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, fue ratificado inmediatamente por el Senado de Rusia, y formaliza de iure a partir de esta medianoche una situación de facto desde hace largo tiempo.
Pero el jefe del Kremlin no se limitó sólo a reforzar el control en sus nuevas adquisiciones territoriales, sino que
redobló mediante otro decreto las medidas de seguridad en todo el país, especialmente en las seis regiones fronterizas con Ucrania, además de la anexionada península de
Crimea.
Los jefes de dichas regiones podrán evacuar a la población residente en ciertas zonas, introducir un régimen especial de entrada y salida de sus territorios, y restringir la libertad de movimiento de la población en ellas.
"El régimen de Kiev, como es bien sabido, se niega a reconocer la voluntad y la elección de la gente", dijo Putin en una reunión por videoconferencia del Consejo de Seguridad de Rusia al argumentar la adopción de estas medidas.
Acusó a las autoridades ucranianas, a las que calificó de
"cómplices de Hitler", de recurrir a "métodos terroristas" para aterrorizar a la población de los territorios ocupados por Moscú en el este y sur de Ucrania.
Las decisiones adoptadas por el Presidente ruso no significan que se planee el cierre de las fronteras del país, respondió el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, al ser preguntado sobre esa posibilidad.
Avance ucraniano en Jersón
La imposición de la ley marcial coincidió con el recrudecimiento de la contraofensiva del Ejército ucraniano en Jersón, que ha obligado a las autoridades instaladas por Rusia a evacuar a la población para facilitar su defensa al Ejército ruso.
Al igual que lo ha hecho en vísperas de operaciones importantes, la jefatura militar guarda un completo mutismo sobre los movimientos de sus tropas en la estratégica región de Jersón, donde nace la península de Crimea.
"A las 12:20 (06:20 en Chile) los nazis ucranianos pasaron a la ofensiva en la dirección Nova Kamenka-Berislav de la región de Jersón", afirmó en su canal de Telegram el vicegobernador prorruso de ese territorio,
Kiril Stremoúsov.
Nova Kamenka se encuentra a 90 kilómetros al noreste de la capital regional, en tanto que Berislav, está ubicada en ribera derecha del río Dniéper.
Las fuerzas ucranianas liberaron en las últimas semanas 75 localidades en el norte y noreste de la provincia sureña o más de 1.200 kilómetros cuadrados, según datos recientes del Mando Sur de Ucrania.
Evacuación de civiles y de la administración prorrusa
La presión permanente del Ejército ucraniano ha obligado a los prorrusos a comenzar hoy la evacuación de cuatro municipios de la ciudad de Jersón, con el fin de "evitar pérdidas civiles".
Según el gobernador en funciones de la región, el prorruso Vladimir Saldo, se espera que el número de evacuados -"deportados", para las autoridades ucranianas-, durante los seis días de duración oscile entre los 50.000 y los 60.000.
"Es difícil decir cuánta gente ha salido. Creo que en torno al 40 por ciento", dijo Saldo a la televisión rusa, y precisó que solo durante la jornada de hoy 7.000 personas fueron evacuadas a la margen izquierda del Dniéper, adonde ya fue trasladada la administración regional.
De momento, añadió el prorruso, no se prevé ampliar el toque de queda que rige desde las 22.00 hasta las 05.00 hora local en toda la región de Jersón.
"La realidad puede doler si vives en un mundo ficticio, de fantasía", comentó el asesor de la Presidencia de Ucrania Mykhailo Podolyak, la evacuación de la administración prorrusa de Jersón.