La
s Fuerzas Armadas y la Policía Nacional de Perú comunicaron este miércoles que no acatarán la orden del Presidente
Pedro Castillo de disolver el Congreso -decisión que ha sido catalogada por la mayoría del espectro político como un golpe de Estado- por lo que se cuadran con el Poder Legislativo y dejan solo al gobernante.
A través de un comunicado, estas instituciones señalaron que "son respetuosas del orden constitucional establecido: el Artículo 134 de la Constitución Política establece que el Presidente de la República está facultado para disolver el Congreso, si este ha censurado o negado su confianza a dos Consejos de Ministros".
Es por eso que, afirmaron,
"cualquier acto contrario al orden constitucional establecido, constituye una infracción a la Constitución y genera el no acatamiento por parte de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú".
"Se invoca a la ciudadanía a mantener la calma y confiar en las instituciones del Estado legalmente establecidas", agregaron.
De esta forma, las FF.AA. y la Policía se suman a otras instituciones, como el Tribunal Constitucional, que han rechazado la medida tomada por Castillo, asegurando que ésta vulnera el Estado de Derecho.
Asimismo, ya son varios los ministros que han renunciado al Gobierno, al mismo tiempo que la vicepresidenta, Dina Boluarte, ha rechazado la disolución del Congreso, asegurando que se trata de "un golpe de Estado".
Todo esto ocurrió horas antes de la sesión programada por el Legislativo en la que se votaría una nueva moción para destituir a Pedro Castillo.