El joven palestino, de 15 años, fue baleado este lunes en un campo de refugiados. Mientras que la mujer británico-israelí había resultado herida el viernes, en un ataque en que murieron sus dos hijas.
EFE
El conflicto palestino-israelí cobró este lunes la vida de un adolescente palestino de 15 años y de una madre británico-israelí que había sido herida el viernes pasado en un ataque en Cisjordania, en el cual fallecieron sus dos hijas.
La violencia se disparó en la región después de que el miércoles de la semana pasada las fuerzas israelíes irrumpieran brutalmente en la mezquita Al Aqsa de Jerusalén, el tercer lugar más santo del islam, para desalojar a los fieles palestinos.
La intervención provocó una oleada de condenas a nivel internacional, así como ataques mortíferos y disparos de cohetes provenientes de Gaza, Líbano y Siria.
Israel replicó, a su vez, con bombardeos y la movilización de unidades policiales de reserva, en plena celebración de la Pascua judía, cristiana y del Ramadán musulmán.
El último episodio de violencia ocurrió este lunes, con la muerte de un adolescente palestino en una operación militar israelí en Cisjordania ocupada. El ejército señaló, en un breve comunicado, que sus "fuerzas de seguridad llevaban a cabo una operación en Aqabat Jaber", un campo de refugiados ubicado cerca de Jericó.
El Ministerio de Salud palestino anunció poco después en un comunicado el deceso de Mohamed Fayez Balhan, de 15 años, "quien murió por balas de la ocupación" tras haber sido alcanzado en la cabeza y en el pecho.
El movimiento islamista palestino Hamás denunció una "ejecución sumaria por parte de las fuerzas de ocupación israelíes".
La operación israelí se produjo al día siguiente de los funerales de dos jóvenes israelíes, de 16 y 20 años, que murieron el viernes en un ataque palestino contra su vehículo en la zona de Jericó.
El ataque dejó también herida a la madre, quien falleció este lunes en un hospital de Jerusalén. "Anunciamos con tristeza la muerte de Lucy (Leah) Dee, víctima del ataque mortal en el valle (del Jordán) el viernes", indicó el hospital Hadassah en un comunicado.
"Desgraciadamente, pese a los intensos y continuos esfuerzos, debido a sus heridas críticas, el equipo tuvo que determinar su deceso hoy", añadió.
El atentado ocurrió en Hamra, en el noreste de Cisjordania, un territorio ocupado por Israel desde 1967.
Ese mismo día murió un turista italiano y otras siete personas resultaron heridas en un supuesto ataque con vehículo en el paseo marítimo de Tel Aviv.
Los asaltos tuvieron lugar después del violento desalojo de fieles palestinos en la mezquita Al Aqsa en pleno Ramadán, el mes sagrado de ayuno para los musulmanes.
Israel justificó su intervención alegando que sus fuerzas "tuvieron que actuar para restablecer el orden" ante los "extremistas" atrincherados en el lugar.
Tras la escalada de violencia, Israel anunció el viernes la movilización de unidades de policía de reserva y de refuerzos militares.