El Presidente francés, Emmanuel Macron, visitó este viernes a víctimas del ataque con cuchillo que dejó seis personas heridas, entre ellas cuatro niños, en Annecy (este), mientras la incertidumbre planea sobre las motivaciones del atacante, un refugiado sirio.
El ataque ocurrido a orillas del turístico lago de Annecy, en los Alpes franceses, conmocionó a Francia y este viernes muchos ciudadanos depositaban flores en el área de juegos infantiles, donde Abdalmasih H., de 31 años, acuchilló la víspera a niños en sus coches.
Dos de los cuatro niños heridos, de entre 22 y 36 meses de edad, siguen en estado crítico, indicó el vocero del gobierno, Olivier Véran, quien llamó a la prudencia y a esperar la investigación, cuando varios políticos de derecha y ultraderecha apuntan a la
"inmigración masiva".
En este contexto de emoción, el Presidente francés y su esposa Brigitte Macron visitaron en un hospital de Grenoble (este) a tres de los cuatro menores heridos y hospitalizados allí y a sus familias, constató un periodista de la AFP.
Los cuatro niños "han podido ser operados y están bajo vigilancia médica permanente", explicó por su parte la primera ministra Élisabeth Borne, quien la víspera se reunió en Annecy con los responsables judiciales y policiales que participaron en la detención del atacante.
Los investigadores buscan ahora determinar qué motivó que Abdalmasih H., un ciudadano sirio que obtuvo el asilo en Suecia en 2013 y que habría llegado a Francia a finales de 2022, acuchillara el jueves en la mañana a seis personas cerca del lago de Annecy.
"La investigación en curso permitirá determinar el móvil", declaró el jueves la fiscal de Annecy, Line Bonnet-Mathis, que por el momento descartó un acto con motivación terrorista y que el agresor actuara bajo los efectos del alcohol o las drogas.
El ministro del Interior,
Gérald Darmanin, indicó que este viernes debía ser sometido a un examen psiquiátrico. Según la cadena local de France Bleu, el hombre todavía no había sido interrogado, ya que está "agitado" e incluso
"se revuelca por el suelo" de la comisaría.
Su ex mujer en Suecia, con la que tuvo una hija de tres años, dijo a la AFP que se marchó ya que "no pudo obtener la nacionalidad sueca". En noviembre de 2022, solicitó el asilo en Francia y este fue rechazado días antes del ataque, un "coincidencia inquietante", según Darmanin.
El atacante, que portaba una cruz y gritó "en nombre de Jesucristo" durante la agresión, padecía una "profunda depresión", según su madre, que vive en Estados Unidos. El rechazo de la nacionalidad, a priori porque estuvo en el ejército sirio, "quizás lo volvió loco", agregó.
"Noche difícil"
La precariedad del exilio "aumenta la vulnerabilidad psicológica", dijo a la AFP Andrea Tortelli, psiquiatra especializada en salud mental de inmigrantes, advirtiendo contra "confundir" migración y actos violentos, porque esto es algo "poco común".
"Muy a menudo han sufrido violencia o vivido situaciones violentas como conflictos", "han experimentado la inmigración forzosa con sus peligros" antes de "llegar a Europa donde se enfrentan a una política migratoria que les pone en dificultades psicológicas", explicó.
A la espera de las respuestas, decenas de ciudadanos de Annecy, en lágrimas, acudieron a depositar flores blancas, peluches, velas o mensajes de apoyo en un pequeño memorial improvisado en el lugar del ataque, donde los niños volvieron a jugar horas después del drama.
Leo Ganassali, un comercial de 21 años, acudió con su hermano pequeño para depositar un enorme ramo de flores tras una "noche difícil". "No estamos preparados" para hechos como este, confesó emocionado el joven, en esta tranquila ciudad de unos 140.000 habitantes.
"Me veo aquí de niño, jugando en este parque, y verlo hoy de luto es muy muy complicado", agregó. "Este parque es mi parque, nuestro parque, el más bello de Annecy", afirmó una mujer de unos 60 años, que no quiso decir su nombre, subrayando la "emoción" palpable en el ambiente.