Ya está todo preparado en París para recibir a los más de 300 representantes que participarán este jueves y viernes en la
"Cumbre por un nuevo pacto financiero mundial", convocada por el Presidente
Emmanuel Macron, con la finalidad de encontrar una solución para cumplir con la meta fijada en 2009 de que los países desarrollados contribuyan con 100 mil millones de de dólares anuales a los países más necesitados en la lucha contra el cambio climático.
Serán cientos de representantes de organizaciones ambientalistas, la sociedad civil y empresas que dirán presente en la cita que también contará con la participación de más de 100 jefes de Estado y de gobierno, varios cuya presencia en París ha llamado la atención.
Uno de ellos es el Presidente de Cuba,
Miguel Díaz-Canel, quien no suele salir mucho de la isla y que se encuentra de gira por Europa. También estará el líder brasileño,
Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo compromiso por la defensa de la Amazonía lo convierten en un actor relevante de esta cita, considerando la distancia que tomó su país con este tema durante el gobierno de su antecesor, Jair Bolsonaro.
También estará el príncipe saudí Mohamed bin Salman -cuestionado por las numerosas acusaciones contra el régimen por violaciones a los derechos humanos- y el Presidente colombiano, Gustavo Petro, quien insistirá en su propuesta de canje de deuda externa por acción climática.
Otro que dirá presente es el primer ministro chino, Li Qiang; la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, y la presidenta de la Comunidad Europea, Ursula von der Leyen, entre otros.
La ceremonia inaugural estará presidida por el propio Macron junto al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, y contará además con las intervenciones del Presidente de Níger, Mohamed Bazoum, y la primera ministra de Barbados, Mia Mottley, una de las principales figuras internacionales en la lucha contra el cambio climático.
Una tormenta de ideas
La cumbre se realizará principalmente en el Palais Brongniart y constará de seis mesas redondas y otras cincuenta reuniones temáticas que se llevarán cabo en las sedes de Unesco y la OCDE.
El objetivo principal de Macron es alcanzar -como bien señala el nombre de la cumbre- un nuevo pacto financiero global para lograr de una buena vez por todas el compromiso adquirido por las grandes potencias mundiales en la Cumbre del Clima de Copenhague en 2009 de contribuir con 100.000 millones de dólares anuales a los países más afectados por la crisis climática (denominados "países del Sur").
De hecho, son estas últimas naciones las que acapararán la cumbre, ya que representan a dos tercios del total de los países participantes, según explicaron desde la Cancillería francesa.
En esa línea, el mayor objetivo es convencer a las grandes compañías y las potencias mundiales a incrementar su apoyo monetario y buscar nuevas formas de desarrollo y financiamiento.
Según fuentes al interior de la organización de la cumbre, las reuniones consistirán más bien en una serie de "tormentas de ideas", donde no se llegará a un acuerdo definitivo, pero sí podrían haber buenas noticias y avances. En ese sentido, se espera que el Presidente Macron entregue información sobre el compromiso de los 100 mil millones de dólares.
No obstante, desde los grupos ambientalistas la sensación general es de escepticismo y no esperan que los resultados de la cumbre respondan "a la escala del problema", según explicaron en una rueda de prensa conjunta convocada por Oxfam Francia y otras cinco ONG (Care, ONE, CCD-Terre Solidaire, Global Citizen y Climate Action Network).
Esas agrupaciones abogaron por que, en vez de dar soluciones marginales y temporales, París sea el primer paso hacia una verdadera reforma estructural del sistema, que en su estado actual mantiene en desventaja a los países más pobres, y hacia una movilización masiva y solidaria de recursos para combatir la crisis climática, según reportó agencia EFE.
"No es solo un deseo, sino una absoluta necesidad para nuestra supervivencia", indicó Harjeet Singh, jefe de estrategia política de Climate Action Network, quien remarcó que no se puede pensar en la crisis climática en términos de oportunidad para "hacer negocio".
"Hay que dejar de pensar que invertir en combatir el cambio climático va a ser rentable. Va a evitar mayores pérdidas", recalcó en el mismo sentido Cécile Duflot, directora de Oxfam Francia.
El encuentro, que será la antesala de la COP 28 que se celebrará en noviembre en Dubai (Emiratos Árabes Unidos), tendrá también eventos paralelos, como el concierto Power Our Planet frente a la Torre Eiffel, encabezado por Billie Eilish, Lenny Kravitz y Jon Batiste, entre otros artistas, y que contará con las intervenciones en vivo de Lula da Silva y Mia Mottley, entre otros.
Cabe señalar que no habrá participación chilena en la cumbre, ya que no fueron enviados representantes nacionales.