Gabriela Cerruti, vocera de Gobierno.
El Mercurio (Archivo)
Como primera reacción de la Casa Rosada a las elecciones primarias celebradas en Argentina, la portavoz de la Presidencia trasandina, Gabriela Cerruti, entendió esta mañana que el domingo quedaron plasmados el enojo y las críticas de la sociedad, que se tradujeron en la victoria del libertario Javier Milei. "Les pedimos perdón", sostuvo la vocera, a la vez que aseguró que en el oficialismo hacen "autocrítica" por lo que pasó.
Por otro lado, la vocera defendió al candidato Sergio Massa, dijo que nunca estuvo en duda su estadía en el Ministerio de Economía e indicó que el titular del Palacio de Hacienda realiza "un trabajo extraordinario", en una semana donde hubo disparadas del dólar y de los precios, e inestabilidad en los mercados.
"Vimos un resultado de tres tercios.
Entendemos, comprendemos y vamos a seguir tratando de comprender las razones, que no empiezan y terminan durante el momento del voto. Hubo una cantidad importante de ciudadanos que decidieron expresar su bronca, su enojo, su frustración, sus críticas, su apreciación sobre cómo están pasándola mal en su vida cotidiana, cómo es que está mal el rumbo del país", entendió la funcionaria durante su tradicional conferencia de los jueves.
Dijo también que desde el Ejecutivo ven a esas familias que se expresaron contra las políticas nacionales y fue ahí cuando manifestó: "Hay una cantidad de gente que expresó su enojo, sus críticas, su mirada negativa sobre la situación en sus vidas y en el país. A ellos les decimos que estamos trabajando en cada momento para mejorar la situación, que tenemos un montón de autocríticas para hacernos. Sentirán que hay algo en sus vidas que el Gobierno ha hecho, algo específico, que no les permite el futuro que quieren. Les pedimos perdón por no haber logrado llegar al lugar donde sienten que no se sienten representados por este gobierno".
Asimismo comentó que entre los que optaron por Milei "seguramente hay votos que no tienen dificultades económicas y que están apoyando un proyecto ideológico". Aclaró no obstante que el libertario sumó respaldo "de diferentes sectores, que expresan diferentes cosas".
Las autocríticas que mencionó estuvieron sobre todo vinculadas a la percepción en Balcarce 50 sobre la elección. Como primera mencionó, por ejemplo, que se "dejaron llevar" por lo que mostraban los canales de televisión y sobre todo los programas políticos, mientras que eso "no influyó demasiado" en la votación. "El candidato más cuidado y que más apareció en los últimos años fue el que salió cuarto o quinto", deslizó en referencia a Horacio Rodríguez Larreta.
En su desglose de los tres tercios, consideró también que hubo una porción de la población que votó en la interna de
Juntos por el Cambio y que quiere volver al gobierno macrista. Aseguró, no obstante, que en la Casa Rosada "comprenden" a quienes piensan diferente de ese período entre 2015 y 2019, que en Unión por la Patria responsabilizan por la realidad económica actual.
Por último se refirió a aquellos que apostaron por mantener el signo político, y votaron por Massa y Juan Grabois. Dijo que "seguramente lo hicieron con dudas y frustraciones" y que fue un acompañamiento que pide mejoras. "Estamos a tiempo de cambiar", expresó, a la vez que indicó: "No es un panorama muy diferente del que esperábamos. Sí en el orden. Entendemos que hay dos de las opciones que representan lo mismo, Mauricio Macri lo dice".
Alberto activo, las declaraciones de Valdés y un "trabajo extraordinario"
En un intento de mostrar al presidente Alberto Fernández activo en la campaña -dadas sus pocas apariciones públicas tanto proselitistas como oficiales- manifestó que "permanentemente trabaja" sobre lo que aún falta mejorar, y que siente el apoyo y también los cuestionamientos durante sus recorridas por el país. "El ministro de Economía junto con el Presidente están desde el lunes trabajando en la situación general, en temas de gestión", aseveró la vocera, quien se refirió a la devaluación del lunes como una "corrección del precio del dólar por el acuerdo con el FMI".
En tanto aclaró -tal como lo hizo Massa anoche- que este valor se mantendrá así hasta octubre. Adelantó también que hoy se anunciarán los próximos Precios Justos, mientras que habrá otras medidas en lo inmediato que intentarán mejorar la situación de los jubilados, los trabajadores informales y quienes reciben asignaciones sociales.
Además, Cerruti buscó despejar las versiones que anoche sonaron fuerte sobre un posible reemplazo de Massa en el Palacio de Hacienda y se refirió a lo que pasó con el diputado nacional
Eduardo Valdés, quien le pidió al ministro que cuando vuelva de Estados Unidos -un viaje que tiene pautado para la semana que viene- renuncie a su cargo y se dedique a la campaña. "Nos parece incorrecto (lo de Valdés), que se expresó mal. Entendemos lo que quiso decir, se lo hicimos saber, fue un error. Uno cuando comunica se equivoca. Fue un error y se lo hicimos saber", contó.
Entonces, elogió a Massa por su tarea en el Palacio de Hacienda. "No solo es el ministro que se hizo cargo de regir la economía en un momento muy complicado, es un piloto de tormenta, sigue siendo un piloto de tormenta; es nuestro candidato. Todos creemos que el ministro está haciendo un trabajo extraordinario, incluso poniendo su salud, sus horas, su familia; entregando un montón de tiempo que debería disfrutar. Lo vemos trabajando hasta altas horas de la madrugada. Está haciendo un trabajo que todos acompañamos y fortalecemos", remarcó.
Por último, consideró "desafortunada" y de una "irresponsabilidad enorme" la expresión de Milei sobre que estaba "preparado para asumir ya" y marcó: "Tampoco nos termina de sorprender nada demasiado de alguien que está teniendo actitudes claramente antidemocráticas, anunciando que va a echar a los trabajadores de diferentes áreas, que va a privatizar la educación... Ayer hizo una comparación absurda con respecto a la NASA y el Conicet, no conoce la diferencia. Esperemos que pueda empezar a explicar de qué está hablando cuando habla de cosas imposibles de llevar adelante o que serían la ruina no para la Argentina, sino para las familias involucradas".