El incendio también dejó 32 heridos, entre ellos su propio autor, quien sufrió quemaduras y estuvo varias semanas en el hospital.
Un hombre japonés admitió este martes haber provocado un incendio que mató a 36 personas en un estudio de animación en Kioto en 2019, aunque sus abogados defendieron su no culpabilidad alegando problemas psiquiátricos.
Shinji Aoba, de 45 años, fue detenido después del incendio en los estudios Kyoto Animation en julio de 2019, que
también dejó 32 heridos.
El martes empezó su juicio por cinco supuestos delitos: asesinato, intento de asesinato, incendio criminal, violación de la propiedad e infracción de la ley de control de armas.
"Es correcto, lo hice", dijo Aoba en el tribunal de distrito de Kioto, según la agencia de noticias Jiji Press.
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No pensé que moriría tanta gente y ahora pienso que fui demasiado lejos", aseguró el hombre que apareció en silla de ruedas.
Sus abogados, sin embargo, declararon su inocencia alegando problemas psiquiátricos, según Jiji Press.
Aoba estuvo a punto de morir por las quemaduras del incendio y pasó varias semanas en coma en el hospital.
Más del 90% de su piel resultó quemada y necesitó 12 intervenciones para recuperarse, explicó esta semana el doctor que lo trató al diario Yomiuri. También precisó una intervención para recuperar el habla.
En diciembre de 2020 fue inculpado oficialmente después de haber sido declarado "apto mentalmente" para ser juzgado.
Se lo acusó de entrar ilegalmente al edificio de los estudios, esparcir gasolina en la planta baja y prender fuego al grito de "muéranse".
Sus motivos no están claros, pero han aparecido hipótesis de que el hombre acusaba al estudio de haber robado su trabajo, algo que Kyoto Animation ha negado.
El estudio, conocido por sus seguidores como KyoAni, es popular por la producción de series de anime televisivas como "La melancolía de Haruhi Suzumiya" o "K-On!".