El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, exigió este martes a Azerbaiyán que cese las hostilidades en la región de Nagorno Karabaj y acusó al Gobierno azerbaiyano de poner en riesgo la paz con Armenia.
"Estados Unidos está profundamente preocupado por las acciones militares de Azerbaiyán en Nagorno Karabaj y urge a Azerbaiyán a cesar inmediatamente dichas acciones", expresó en un comunicado Blinken, quien se encuentra en Nueva York participando en la Asamblea General de la ONU.
Azerbaiyán lanzó este martes una operación militar en el territorio separatista de Nagorno Karabaj tras denunciar provocaciones y ataques terroristas por parte de Armenia, que calificó de "limpieza étnica" la ofensiva que tiene lugar tres años después de la última guerra entre ambos bandos.
El jefe de la diplomacia estadounidense reprochó que esta operación está "empeorando la ya de por sí crítica situación humanitaria" de la región y está "dilapidando las posibilidades de que haya paz".
"Como ya hemos avisado a Azerbaiyán, el uso de la fuerza para resolver disputas es inaceptable y va en contra de los intentos de crear las condiciones de una paz justa", dijo.
Tras semanas de choques armados y acusaciones mutuas de concentración de tropas, no solo en torno al Karabaj, sino también en la frontera entre ambos países, se reavivan las tensiones entre ambos pueblos enfrentados desde 1988 por el control de ese enclave, que pertenece a Azerbaiyán pero está poblado por unos 120.000 armenios.
El pasado junio, Blinken medió en unas conversaciones de paz entre Azerbaiyán y Armenia que se llevaron a cabo en Washington sin que trascendieran acuerdos concretos.
Erdogan apoya ofensiva azerbaiyana
Todo lo contrario a Washington D.C., el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo el martes "apoyar" a su aliado histórico Azerbaiyán en el lanzamiento de una operación militar en Nagorno Karabaj.
"Apoyamos las medidas tomadas por Azerbaiyán (...)
para defender su integridad territorial", afirmó el mandatario turco en la red social X (antes Twitter).
"Karabaj es un territorio azerbaiyano. La imposición de otro estatuto nunca será aceptado", agregó.
Poco antes, el ministerio turco de Relaciones Exteriores había calificado de "legítimas" las "preocupaciones" que llevaron a Azerbaiyán a lanzar la ofensiva.
"Como consecuencia de las preocupaciones legítimas y justificadas que ha expresado reiteradamente (...), Azerbaiyán se vio obligado a tomar medidas que considera necesarias sobre su propio territorio soberano", indicó, aunque instó al mismo tiempo a "continuar el proceso de negociaciones entre Azerbaiyán y Armenia".
Erdogan ha declarado en varias ocasiones que Turquía y Azerbaiyán forman "dos Estados, una sola nación", una afirmación que refleja la proximidad histórica entre ambos países.
Las relaciones entre Turquía y Armenia, en cambio, están empañadas por las masacres de armenios cometidas durante la Primera Guerra Mundial en el Imperio otomano (la actual Turquía). Ereván y numerosos países lo consideran un genocidio, un término que Ankara rechaza.