Las alertas de guerra están encendidas. Las cifras de países que se encuentran enfrentados crecen. Ante las inminentes amenazas, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), realizará las mayores maniobras militares "en décadas", para estar preparados y poner en marcha los nuevos planes de Defensa acordados por la constante amenaza de Rusia y su invasión militar de Ucrania.
Se trata de "Steadfast Defender 2024" (Firme Defensor 2024), el mayor ejercicio de la OTAN desde la guerra fría y en el cual participarán los 31 miembros de la organización, además de Suecia.
A pesar de que el número de tropas no está confirmado, ya suman más de 90 mil los soldados que trabajarán en conjunto en terreno alemán, polaco, báltico, y en el mar del Norte desde la próxima semana hasta mayo, según reveló el máximo comandante de la alianza, Chris Cavoli.
Según Cavoli, "la Alianza demostrará su capacidad para reforzar el área euroatlántica mediante un movimiento trasatlántico de fuerzas desde América del Norte".
La situación es crítica y queda en evidencia a través del entrenamiento que realizaran: lo tildan como una simulación de la III Guerra Mundial, y se trata de un "ataque" a algún miembro de la OTAN por parte de Occasus, un enemigo ficticio similar a Rusia, país etiquetado por la organización como "la amenaza más significativa y directa para la seguridad de los aliados, la paz y estabilidad de la zona euroatlántica".
La maniobra militar se convierte en una "clara demostración de la unidad y fortaleza trasatlánticas y de la determinación de seguir haciendo todo lo necesario para la protección mutua de los valores y el orden internacional basado en normas", reveló el comunicado.
El "rol de líder" lo asumió Reino Unido, quien rápidamente anunció que cerca de 20 mil soldados británicos formarán parte de la brigada, además de dos mil marinos. Esto, además de entregar ayuda material, como buques de guerra, submarinos y flota aérea.
Las advertencias alemanas
La situación claramente incrementó con las recientes advertencias por parte del gobierno alemán. Según un documento clasificado del Ministerio de Defensa de Alemania, el presidente ruso Vladímir Putin intentará dar inicio a una guerra entre Moscú y la OTAN durante el verano de 2025.
En específico, el documento clasificado, expuesto por el medio alemán Bild, reveló que en febrero de 2024, Putin movilizaría a 200 mil soldados en Rusia y atacaría Ucrania entre marzo y junio, asentándose en el país.
Desde ahí, lanzaría ciberataques a los países bálticos, además de incitar la violencia en Letonia, Estonia y Lituania, utilizando la misma táctica que en Ucrania en febrero de 2022: que las minorías rusas estaban siendo atacadas.
"Las primeras víctimas rusas"
Los países bálticos -Estonia, Lituania y Letonia- han sido particularmente expresivos al pedir a la OTAN que refuerce su frontera oriental, y es que con el paso del tiempo, las tropas en la frontera bielorrusa no dejan de acumularse.
Las sospechas no quedan ahí. Según el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), el presidente ruso comenzó a preparar el escenario para las "futuras escaladas". De hecho, según Business Insider, Putin está haciendo creer que hay una opinión global de "rusofobia" con declaraciones en las que indica que algunas naciones bálticas están "simplemente expulsando" a los rusos étnicos de sus territorios.
Eso, efectivamente está sucediendo, pero no por "fobia" sino bajo el contexto de una ley existente en Letonia, la que exige que los residentes realicen un examen del idioma letón para permanecer en el territorio. En diciembre, 1.200 rusos fueron notificados por no renovación sus permisos.
