El portavoz de Estado Islámico celebró el ataque del grupo que mató a más de 140 personas en una sala de conciertos rusa cerca de Moscú e hizo un llamado para que los "lobos solitarios" ataquen a cristianos y judíos en Estados Unidos y Europa.
Abu Huthaifa al-Ansari, un vocero del que se sabe muy poco desde el cambio de liderazgo en Estado Islámico (EI, o ISIS, por sus siglas en inglés) en agosto pasado, habló en un mensaje grabado publicado el jueves en el canal Telegram del grupo jihadista.
Al-Ansari dijo a los
"lobos solitarios" -las personas radicalizadas que actúan inspirados en la ideología jihadista- que se movilizaran y atacaran en concentraciones masivas contra cristianos y judíos en Estados Unidos, Europa e Israel.
El portavoz llamó a los extremistas a atacar durante el actual mes de Ramadán, el mes sagrado del calendario musulmán, que comenzó el 11 de marzo de este año y durará hasta el 10 de abril.
La declaración fue difundida para conmemorar el décimo aniversario de la declaración del califato en Siria e Irak de la mano de su entonces líder, Abu Bakr al-Baghdadi.
"Pedimos a Dios que lleguen a Palestina para poder luchar contra los judíos cara a cara en una guerra religiosa sin fin", dijo Al-Ansari en otro fragmento de su audio, difundido por la Fundación Al-Furqan, la principal productora de medios del Estado Islámico.
En enero, después de que ISIS reivindicó la responsabilidad por un doble atentado suicida en Irán que dejó 84 muertos, el vocero ya había hecho un llamado a atacar a judíos, cristianos y aliados de Estados Unidos y Europa a raíz de la guerra entre Israel y Hamas, en un artículo que se titulaba "Mátalos dondequiera que los encuentres". En Occidente, varios países elevaron sus alertas por la posibilidad de un rebrote terrorista tras la ofensiva israelí en la Franja de Gaza.
"Propaganda absurda" de Rusia
Mientras tanto, Rusia afirmó el jueves tener la "prueba" de que los autores del atentado en una sala de conciertos cerca de Moscú, que dejó 143 muertos, tenían vínculos con "nacionalistas ucranianos", lo que Estados Unidos tachó de "propaganda absurda".
El ataque, que se produjo el viernes por la noche en el Crocus City Hall, fue reivindicado por Estado Islámico, y las autoridades estadounidenses apuntan concretamente a ISIS, la filial del grupo en Afganistán, pero las autoridades rusas insisten desde hace varios días en la pista ucraniana.
Ucrania y sus aliados desmienten cualquier implicación en la matanza y estiman que el Kremlin, en pleno conflicto armado con Ucrania, busca culpar a su vecino por motivos políticos.
El Comité de investigación ruso, encargado de las principales investigaciones criminales, afirmó que tiene nuevos elementos que avalarían la pista ucraniana. "El trabajo llevado a cabo con los terroristas detenidos, el examen de los dispositivos técnicos que llevaban y el análisis de las transacciones financieras permitieron obtener pruebas de sus vínculos con los nacionalistas ucranianos", declaró en Telegram el Comité.
De acuerdo a este órgano, los cuatro atacantes recibieron "importantes sumas de dinero y criptomonedas provenientes de Ucrania, que usaron para preparar el crimen".
Pero no publicaron ningún documento u elemento para corroborar sus declaraciones. Los investigadores informaron también sobre el arresto de un nuevo sospechoso, al que acusan de haber participado a financiar el ataque.
Con esta persona, un total de doce personas fueron detenidas por este matanza, incluyendo los cuatro presuntos atacantes. Ocho de ellos fueron inculpados y puestos en detención preventiva.
La Casa Blanca acusó a Rusia de querer difundir una "propaganda absurda" sobre el atentado, del cual el Estado Islámico es el "único responsable".
Estados Unidos afirmó que había advertido a Rusia a principios de mes que era probable que un atentado terrorista tuviera como objetivo grandes concentraciones en Moscú.