El primer ministro eslovaco, Robert Fico, se mantiene en estado "crítico" tras haber recibido varios disparos este miércoles en un intento de asesinato, que el gobierno de ese país de Europa Central tildó de "ataque político".
El dirigente fue evacuado en helicóptero del lugar del ataque y trasladado de urgencia al hospital de la ciudad de Banska Bystrica, donde los médicos lo operaron para salvarle la vida.
"Pienso que al final sobrevivirá", declaró a la cadena británica BBC su vice primer ministro, Tomas Taraba, señalando que la intervención tuvo éxito. "En este momento su vida no corre peligro", agregó.
Previamente, el ministro de Interior, Matus Sutaj Estok, había dicho a la prensa concentrada frente al hospital que "el primer ministro está en estado crítico y su vida corre peligro".
La presidenta eslovaca, Zuzana Caputova, anunció en un comunicado que "la policía detuvo al atacante". "Estoy conmocionada, todos estamos conmocionados por el terrible y atroz ataque", añadió.
Imágenes obtenidas por AFPTV mostraban a un hombre esposado en el suelo. Según medios de comunicación locales, el sospechoso del ataque es un escritor de 71 años.
"Creo que puedo confirmarlo, sí", respondió el ministro de Interior a las preguntas de los periodistas sobre la identidad del atacante.
"No tengo ni la más remota idea de lo que estaba pensando mi padre, de lo que estaba planeando ni del porqué", declaró el hijo del sospechoso a la web de noticias eslovaca aktuality.sk.
El ataque se produjo después de una reunión del gobierno en la localidad de Handlova.
De allí, Fico fue evacuado a Banska Bystrica "ya que se tardaría demasiado en llegar a Bratislava", la capital, dijo el ejecutivo en un comunicado.
El líder populista, acusado de ser afín al Kremlin, recibió varios disparos. La directora del hospital, Marta Eckhardtova, informó que el primer ministro ingresó en la unidad de cirugía vascular, pero no describió sus heridas.
Condenas del ataque
El presidente electo eslovaco, Peter Pellegrini, declaró haber sentido "horror" al enterarse del tiroteo contra su aliado.
"Un intento de asesinato contra uno de los mayores cargos constitucionales es una amenaza sin precedentes para la democracia eslovaca", añadió en la red social X.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, también condenó enérgicamente "el vil ataque". "Estos actos de violencia no tienen cabida en nuestra sociedad y socavan la democracia, nuestro bien común más preciado", afirmó.
Otros numerosos dirigentes europeos mandaron mensajes de apoyo a Fico, como el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, o los primeros ministros de Polonia, Donald Tusk; República Checa, Petr Fiala; o Reino Unido, Rishi Sunak.
También llegaron reacciones desde América Latina. El gobierno chileno condenó "toda forma de violencia que atente contra la democracia" y el de Brasil expresó "consternación" y "repudio" ante el ataque.
Relaciones con Ucrania
Además de su actual mandato como primer ministro, Fico también estuvo al frente del gobierno en los periodos 2006-2010 y 2012-2018.
Desde su última elección, en octubre, Fico ha hecho una serie de comentarios que han deteriorado los lazos entre Eslovaquia y Ucrania, abogando por una negociación con Rusia para poner fin a la guerra.
Cuando fue elegido, Eslovaquia dejó de enviar armas a Ucrania, que se enfrenta a una invasión rusa desde 2022. Durante la campaña electoral prometió que no proporcionaría a Kiev "ni una sola bala".
Pese a las complicadas relaciones, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, condenó "este acto de violencia contra el jefe de gobierno" de su "Estado socio vecino".
Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, calificó de "crimen odioso" el ataque, describiendo a Fico como "un hombre valiente y decidido".
Fico también provocó protestas masivas debido a sus polémicos cambios, entre ellos una ley de medios de comunicación que, según los críticos, socavará la imparcialidad de la radio y la televisión públicas.
En una rueda de prensa posterior al tiroteo, el diputado Lubos Blaha, del partido Smer de Fico, arremetió contra sus detractores.
"Ustedes, los medios de comunicación liberales y los políticos progresistas tienen la culpa. Robert Fico está luchando por su vida por culpa de su odio", dijo.